BAHÍA BLANCA.– La llegada del presidente Javier Milei a esta ciudad hoy a la mañana tomó por sorpresa a la población. Como todas las comitivas presidenciales, llegó con un fuerte operativo de custodia, acompañado de la secretaria general, Karina Milei; el ministro de Defensa, Luis Petri; la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, y el jefe de Gabinete, Guillermo Francos. Se encontraron con el intendente de la ciudad, Federico Susbielles, y recorrieron distintos puntos sin ningún anuncio previo.

La mayor repercusión entre los vecinos llegó cuando el mandatario se acercó a la obra que se está ejecutando en el puente Zelarrayán, que, como muchos otros, se había derrumbado tras la tormenta y donde ahora el Ejército está colocando un puente modular metálico, ya que la mayoría de los accesos que cruzan por encima del canal Maldonado quedaron inutilizables.

En la zona, muchos lo recibieron con bronca. Es un sentimiento que se asentó en la mayoría de los bahienses durante esta semana trágica por las consecuencias del temporal y la inundación, mientras que sigue la búsqueda de un centenar de personas, según afirmó a LA NACION el fiscal general de Bahía Blanca, Juan Pablo Fernández, y no se descarta que aumente la cifra de fallecidos, por el momento cuantificados oficialmente en 16, pero que las personas del pueblo aseguran que en realidad son más.

El intendente Federico Susbielles recibió a Javier Milei y la comitiva oficial

No fueron tantos los que vieron pasar al Presidente, a causa del secretismo de la misión oficial, pero los vecinos igual vertieron sus opiniones. Un grupo de personas que se encontraba en las inmediaciones de ese puente al que se acercó Milei dijeron a este medio que “se necesitan acciones, no fotos”. Es que, según cuentan, las donaciones no se están repartiendo en tiempo y forma. “Faltan muchas cosas, nosotros agradecemos la ropa, pero ahora pedimos que, por favor, traigan comida. Que traigan colchones”, sostuvo Carla, una residente de la zona.

Adrián apuntó en un sentido similar: “Sí, vino como todo político, pero no hacen anuncios concretos. ¿Qué va a pasar con la gente que perdió todo? Necesitamos ayuda de verdad, que escuche las preocupaciones reales de los que vivimos acá. Estaba rodeado de militares, eso no es venir a escuchar al vecino”.

Otra opinión sostenida es que hace años que en la ciudad no se hacen obras de infraestructura, y que esto es independiente del partido político de turno. Así y todo, Luciana recordó la tormenta del 16 de diciembre de 2023, días después de la asunción de Milei en el Gobierno. En ese momento, las ráfagas de viento superaron los 100 km/h y dejaron un saldo de 13 muertos informados. “Nos dijo que nos arregláramos con lo que teníamos, y ahora viene para acá, ¿a qué?”, sostuvo. En aquel momento, el Presidente se refirió a los recursos: “Quiero mencionar y rescatar que, ante estos eventos tan adversos, los argentinos siempre sacamos lo mejor de nosotros, logramos poner siempre a prueba nuestra resiliencia y solidaridad. Por lo tanto, estoy perfectamente confiado en que ustedes van a lograr poder resolver esta situación de la mejor manera posible, con los recursos existentes”.

Entre otros lugares, el Presidente visitó las obras para el tendido de un puente sobre el canal Maldonado

También se refirió a la falta de obras de infraestructura que pudieran haber atenuado las consecuencias de la catástrofe y a la falta de acciones en general: “Acá las rutas, las podés ver, están todas poceadas, rotas. Son un desastre, y eso no fue la tormenta. No hay nadie que ponga un peso para arreglar las calles. Iban a construir una ruta en la altura [en la 33] de tres carriles y la frenaron. Así no vamos a llegar a ningún lado”.

En su visita de hoy, el mandatario casi no efectuó declaraciones. Salió pasadas las 6.30 del aeroparque Jorge Newbery, llegó antes de las 8 a Bahía Blanca en un avión de la Fuerza Aérea y se trasladó directamente al centro de monitoreo –ubicado en Drago al 1600– a bordo de una camioneta.

Durante sus horas por terreno bahiense, la agenda de Milei consistió en monitorear el operativo desplegado por el Gobierno para brindar asistencia a las localidades más golpeadas (Cerri e Ingeniero White), supervisar las obras en el puente y hospital modulares que instalaba el Ejército y tomar contacto con algunos damnificados por la inundación del viernes pasado tras la caída de 400 milímetros de lluvia en pocas horas. El Presidente emprendió el regreso este mediodía a la ciudad de Buenos Aires y tenía previsto retomar sus actividades en la Casa Rosada alrededor de las 14.30.