A dos semanas de la muerte de Jorge Lanata, Elba Marcovecchio tuvo el martes un mano a mano con Ángel De Brito en LAM (América). En su charla, dio detalles de las últimas horas con vida de su esposo, de las diferencias con las hijas del periodista (Bárbara y Lola) y de la batalla judicial que enfrentará por la división de bienes. Sin embargo, uno de los momentos más emotivos fue cuando reveló los proyectos que ambos tenían para agrandar la familia, entre otros objetivos que quedaron inconclusos.
Con la voz quebrada, la abogada describió cómo fue el instante en que se despidió de Jorge y la reflexión que tuvo mientras estaba dormido. Según explicó, ingresó a la sala y, después de rezar, les agradeció a Dios y a él por el tiempo que compartieron juntos. “Nos dio amor”, dijo.
Segundos después, De Brito le consultó: “¿Pensaban tener hijos?”. Al escucharlo, Marcovecchio respondió contundente que sí y continuó: “Él me lo propuso desde el principio. Jorge quería todo, quería que tuviéramos un hijo, quería adoptar a los nenes [Valentino y Allegra, hijos de la abogada], quería que nos casáramos”.
En tanto, reflexionó: “Pero, yo tener hijos ya no quería. Él, en cambio, sí, quería que fuera una nena y yo le decía ‘¿cómo hago?’. Tenía que hacer tratamientos porque estoy grande, entonces yo le decía que estábamos bien con los cuatro que teníamos y que ya había un ramillete de hijos”.
A pesar de aquellos proyectos matrimoniales que quedaron pendientes, Elba reiteró que la adopción de sus hijos por parte de Jorge quedó nula porque ella lo decidió así, ya que los niños tenían su propio apellido. Por último, destacó: “Él los amó”. Después quedó en silencio y el periodista continuó con la entrevista, la cual direccionó para otro tema.