El presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón (Jorge Gil - Europa Press)

En un informe enviado por la Generalitat Valenciana a la jueza de Catarroja, al que ha tenido acceso Infobae España, el Gobierno de Mazón ha reconocido que en el Cecopi hubo un parón de la reunión ‘online’.

La reunión se realizó de manera telemática y presencial simultáneamente habiendo un momento concreto en el que lo que se produjo un periodo de trabajo exclusivamente presencial”, explica el escrito.

Añaden que “en dicho periodo se valoró por los técnicos presentes en el Cecopi las posibilidades de comunicación a través de los medios masivos a la población, tal y como marca el Plan Especial frente al Riesgo de Inundaciones de la Comunitat Valenciana en su página 95″.

La posible rotura de la Presa de Forata

También “se valoró la posibilidad de enviar un mensaje ES-ALERT, habida cuenta que el riesgo de rotura estaba previsto para un plazo máximo de tres horas, dirigido a la población de la zona potencialmente afectada por el posible colapso de la Presa de Forata”.

“El contenido del mensaje ES-ALERT, a juicio de los técnicos presentes en el Cecopi, debía ser redactado de forma que no provocara un efecto contrario al pretendido que podría agravar la situación que incluso en el caso de la posible rotura de la Presa hubiera provocado unas consecuencias todavía mayores”.

Sin embargo, dicho aviso no fue enviado hasta que el Cecopi recibió la llamada del secretario de Estado, Hugo Morán, que situó “el riesgo de rotura de la presa de Forata como inminente una hora antes incluso de lo advertido en la propia reunión”.

En el mismo informe se explica que el Centro de Coordinación de Emergencias de la Generalitat estableció la situación de “Escenario 2″ de la presa a las 18:10 horas del día de la dana.

Este nivel significa que “tiene un carácter excepcional. Existe peligro de rotura o avería grave de la presa y no puede asegurarse con certeza que pueda ser controlado mediante la aplicación de las medidas y medios disponibles”.

Ante la situación, los municipios debían tomar las siguientes medidas:

  • Evacuaciones preventivas de la población potencialmente afectada por la onda de avenida en caso de rotura.
  • Prohibición y cese de actividades en los cauces y en zonas previsiblemente inundables.
  • Policía Local y Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado realizarán los cortes y control de tráfico y retirada de vehículos en los viales que puedan ser afectados por la onda de avenida.
  • Coordinación de los recursos locales y externos para la adopción de las medidas de protección a la población, en especial el alejamiento, la evacuación, albergue y abastecimiento en caso necesario.
  • Avisos de carácter preventivo e información a la población sobre la situación y evolución de la emergencia.

(Noticia en ampliación)