El 2017 fue el año con más olas de calor. Sin embargo, el 2022 fue el año en el que duraron más, con 41 días. Estas han sido algunas de las conclusiones del Estudio sobre las olas de calor en nuestro país desde 1975 elaborado en diciembre por el Área de Climatología y Aplicaciones Operativas de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET).
Así, el estudio muestra que el 2017 se convirtió en el año con más olas de calor de todos los estudiados tras registrar un total de cinco episodios. A ese año le siguen 1991, 2016 y 2023, que registraron cuatro. Los 41 días con ola de calor de 2022 se repartieron en tres episodios diferentes. Tras ese año, se sitúa el 2015, que registró 29 días con ola de calor, mientras que el 2017 y el 2023 empataron con 25 días.
La ola de calor más larga registrada duró 26 días y se desarrolló en 2015. La segunda fue de 18 y tuvo lugar en 2022, mientras que en tercer lugar empataron otra ola de calor de ese año y otra de 2003 con 16 días. Con respecto a la de 2003, AEMET ha recordado que causó «miles de víctimas mortales repartidas por gran parte de Europa».
La investigación detalla que en 2022 se produjo la ola de calor más extensa, con 44 provincias afectadas el 16 de julio. Ese año también registró la tercera más extensa, cuando 39 provincias sufrieron afectación el 16 de junio en una de las olas de calor más tempranas de toda la serie. Entre medias estuvo una ola de calor de 2012, la segunda más extensa de la serie. El 10 de agosto de ese años, 40 provincias se vieron afectadas.
En lo que respecta a Canarias, el informe revela que el 2012 fue el año con más olas de calor –seis– y con más días con ola de calor –27–. Además, la última, que tuvo lugar entre el 3 y el 5 de noviembre, fue la más tardía de toda la serie. Tras ese año, el 2023 tuvo 26 días con olas de calor y 1976, 25.
La ola de calor más larga de toda la serie en el archipiélago fue la que discurrió entre el 2 y el 17 de octubre de 2023, lo que suma 16 días. Le sigue una de 1976, con 14 días. El episodio más temprano se desarrolló entre el 25 y el 27 de abril de 2008.
AEMET indica que la ola de calor más destacada en la Península, Baleares, Ceuta y Melilla fue la de 2017, con una temperatura máxima de la ola de 41,1°C el 13 de julio; seguida de la de 1975 con 40,4 °C el día 16 de julio. En lo que concierne a Canarias, la temperatura máxima de la ola más elevada se alcanzó el 27 de junio de 2012, cuando se llegó a 29ºC. En segundo lugar se encuentran los 37,6°C del 10 de julio de 2022 y en tercero, los 37,4 °C de los días 22 de junio de 2011 y 30 de julio de 2007.
Aún así, el organismo estatal especifica que a la hora de valorar la intensidad de una ola de calor es mejor utilizar como indicador la anomalía de la ola, ya que la temperatura máxima está muy influenciada por las estaciones que la registren. De esta manera, las olas de calor que afecten solo al sur peninsular tendrán en general valores más altos que las que se extiendan también por el norte o solo por el norte.
En este sentido, destaca la ola de calor registrada entre el 9 y el 26 de julio de 2022 en la Península, Baleares, Ceuta y Melilla, que tuvo una anomalía de 4,5°C. Le sigue la que transcurrió entre el 11 y el 16 de agosto de 2021, con 4,1°C. En tercer lugar, con una anomalía de la ola de 4°C, figuran las acaecidas entre el 17 y el 25 de agosto de 2023, entre el 26 de junio y el 1 de julio de 2019 y entre el 11 y el 16 de agosto de 1987.
Mientras, en el archipiélago canario, la anomalía de la ola más elevada, 7,1°C, se alcanzó en la ola de calor que tuvo lugar entre el 25 y el 27 de junio de 2012. Tras ella están los 6,9°C de la registrada entre el 23 y el 29 de julio de 2004, y los 6,8 °C de la que transcurrió entre el 28 y el 31 de julio de 2007.
2004-2005 TUVO CINCO OLAS DE FRÍO, PERO LAS DE 2001-2002 DURARON MÁS
A su vez, el Área de Climatología y Aplicaciones Operativas de AEMET también ha elaborado un estudio sobre las olas de frío en España desde 1975. De esta forma, el organismo estatal ha destacado el invierno de 1980-1981, que totalizó 31 días con ola de frío repartidos en cuatro episodios. A este le siguió el de 2004-2005, con 27 días de ola de frío en cinco episodios; y el de 1975-1976, con 22 días en cuatro episodios.
El estudio muestra que la ola de frío más larga se registró entre el 13 y el 29 de diciembre del invierno de 2001-2002 (por lo que supuso un total de 17 días de duración). Las siguientes en duración, con 14 días, tuvieron lugar en los inviernos de 1980-1981 y 1984-1985. En lo que concierne a la extensión, menciona la ola de frío que afectó a 45 provincias el 14 y 15 de enero de 1985; la que impactó en 44 provincias el 13 de febrero de 1983; y la del 12 de febrero de 2012, que alcanzó a 39 provincias.
El valor más bajo registrado en una ola de frío en la serie corresponde a los -9ºC del 20 de diciembre de 2008, seguido del -8,8ºC del 17 de noviembre de 2007. Al igual que sucede con las olas de calor, el organismo estatal ha recomendado utilizar la anomalía de temperatura para mostrar la intensidad de una ola de frío. Así, las olas de frío más destacadas son las registradas en los inviernos de 1984-1985, con una anomalía de la ola de -5,5°C, de 2004-2005 con -5,1°C, 2001-2002 con -5,0°C y de 1982-1983 con -4,8°C.
Por último, la investigación aprecia que hay varios inviernos sin ninguna ola de frío, entre ellos los de 2023 y 2024.