Luego de la derrota de Independiente ante Newell’s en Rosario, el conjunto de Avellaneda sumó otro conflicto: Iván Marcone, capitán del equipo, fue denunciado por perseguir a una hincha y agredirlo en plena vía pública durante la madrugada del jueves en Sarandí. El denunciante le había gritado que se vaya del club y el jugador se bajó del auto y lo atacó.
Según relato el socio del Rojo en su denuncia, vio a Marcone en la puerta de la casa de un familiar, le gritó y se fue. El mediocampista lo siguió y, cuando el hincha estaba ingresando a su domicilio, se bajó de su auto y le empezó a pegar.
Durante el ataque, al denunciante se le cayeron las llaves de su vehículo a la calle, el futbolista las tomó y volvió a su auto, encendiendo la marcha y acelerando. “Vení a buscarlas a casa”, le advirtió y abandonó el lugar. Acto seguido, el socio de Independiente volvió al domicilio, donde fue recibido por dos allegados a Marcone que le devolvieron el objeto. Sin embargo, el jugador se asomó y amenazó con pegarle a cualquier hincha que le grite algo.
Por el momento no se expresaron públicamente ni desde el club, ni su presidente, Néstor Grindetti. El futuro de Marcone es incierto, no solo por una posible sanción por el incidente en Sarandí, sino también porque su contrato finaliza en diciembre.
Según informó el medio Doble Amarilla, desde el entorno del jugador justificaron la reacción afirmando que el hincha venía hostigándolo hacía tiempo. Lo habría insultado durante semanas e, incluso, en la casa del exjugador del seleccionado argentino.
A Independiente ya le informaron sobre el episodio y está al tanto de la situación. Se espera que la dirigencia encabece una reunión con el futbolista para escuchar su versión y definir si tomará cartas en el asunto, aunque por el momento todo indica que no.
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