El magnesio es un mineral clave en el organismo, involucrado en funciones como la regulación muscular, la digestión y el sistema nervioso. En el caso del citrato de magnesio, este compuesto actúa como un laxante salino que favorece la retención de agua en las heces, facilitando su evacuación.

Según el sitio especializado MedlinePlus, este suplemento se presenta en polvo y debe mezclarse con agua o jugo antes de su ingesta. Una vez preparado, puede conservarse refrigerado por hasta 36 horas.

Cuáles son sus beneficios

El citrato de magnesio es más que un laxante. Entre sus principales ventajas se encuentran:

  • Regulación intestinal: promueve la regularidad y suaviza las heces, lo que facilita su expulsión.
  • Alivio de la acidez: neutraliza el exceso de ácido gástrico.
  • Salud muscular: ayuda a prevenir calambres y espasmos musculares.
  • Bienestar emocional: contribuye a reducir el estrés, mejora el estado de ánimo y favorece el sueño al intervenir en la producción de serotonina.
  • Control metabólico: puede ser útil en la regulación de la presión arterial y los niveles de glucosa en sangre, un beneficio especialmente valioso para personas con diabetes tipo 2.

El magnesio, entre otras cosas, neutraliza el exceso de ácido gástrico

¿Cómo tomarlo de manera adecuada?

La dosis de citrato de magnesio puede tomarse en una sola porción diaria o dividirse en varias tomas, según las indicaciones médicas. Para prepararlo correctamente:

  1. Mezclar el polvo con 296 ml de agua fría o jugo.
  2. Agitar bien hasta que se disuelva.
  3. Conservar en la heladera si no se consume inmediatamente y desecharlo después de 36 horas.

El efecto laxante suele aparecer entre los 30 minutos y las seis horas posteriores a su consumo. Sin embargo, es importante no prolongar su uso más allá de una semana, salvo que un médico indique lo contrario.

Un consumo excesivo o inadecuado puede provocar mareos, náuseas, somnolencia, ritmo cardíaco lento o diarrea intensa.

Precauciones antes de empezar

Antes de iniciar un tratamiento con citrato de magnesio, se recomienda tener en cuenta ciertas consideraciones:

  • Consultar al médico sobre alergias o interacciones con otros medicamentos.
  • Evitar su uso en casos de sangrado rectal, obstrucción intestinal o problemas médicos graves.
  • Tener especial cuidado si existen enfermedades cardíacas, renales o intestinales, así como dolor abdominal persistente.

Es común que su uso ocasione heces acuosas o más frecuentes, y en algunos casos puede derivar en estreñimiento al suspenderlo.

Un suplemento bajo supervisión médica

Aunque el citrato de magnesio ofrece múltiples beneficios, su uso debe ser supervisado por un profesional de la salud. Estas recomendaciones son generales y no reemplazan una consulta médica. Ante cualquier duda o síntoma inusual, lo mejor es buscar asesoramiento adecuado.