Al menos 81 personas han muerto y casi medio millón han terminado desplazadas en Filipinas por el devastador impacto de la tormenta tropical ‘Kristine’ que ha llegado acompañada de inundaciones generalizadas y deslizamientos de tierra.

Los equipos de rescate, que siguen luchando para llegar a los residentes atrapados por las inundaciones en sus propias viviendas, han señalado que la mayoría de víctimas mortales han sido provocadas por las fuertes precipitaciones y los corrimientos de tierra.

Al menos 34 personas siguen desaparecidas, según ha confirmado el último balance de la Oficina de Defensa Civil (OCD) del país, publicado este sábado.

La mayoría de los muertos procedían de la provincia de Batangas, al sur de Manila, donde distintos deslizamientos de tierra sepultaron decenas de casas. El resto se encuentran en la provincia de Bicol, donde se han registrado 28 fallecidos, seguida de Calabarzón, con 15. Además, en Ilocos, Luzón y Zaboanga se han registrado un muerto, respectivamente.

Las lluvias torrenciales provocadas han causado el desbordamiento de varios ríos y han sumergido pueblos enteros, que han quedado completamente anegados. Además, decenas vehículos han sufrido daños por el desprendimiento de sedimentos volcánicos, tal y como han recogido varios medios locales.

No obstante, el portavoz de la agencia, Edgar Posadas, ha pronosticado que las tareas de socorro ganarán velocidad este fin de semana, toda vez que la tormenta ha abandonado la isla.