En julio de 2025, el mercado argentino de autos usados mostró un repunte significativo en su actividad, contrastando con la caída en la venta financiada de autos 0km que atraviesa el sector. Este comportamiento se explica, en buena medida, por el contexto de suba de tasas de interés instrumentado por el Gobierno, que retrajo el acceso al crédito para vehículos nuevos y estimuló el desplazamiento de la demanda hacia los usados.
De acuerdo con la Cámara del Comercio Automotor (CCA), durante julio se comercializaron 179.363 vehículos usados en todo el país. Si bien esta cifra representa una leve baja del 2,3% en la comparación interanual frente a julio de 2024, el dato relevante es el fuerte crecimiento respecto a junio de un 25,2%, ya que se vendieron 143.191 unidades. Esta suba mensual ubicó a julio como el mes más fuerte en ventas de lo que va del año.
El balance acumulado de los primeros siete meses muestra una tendencia positiva: en el período enero-julio se transfirieron 1.097.767 vehículos, un incremento del 18,9% en relación al mismo lapso de 2024, cuando se habían registrado 923.066 unidades. Esta recuperación tiene su epicentro en el interior del país, donde provincias como Formosa, Neuquén, La Rioja, Catamarca y Jujuy encabezan el ranking de crecimiento, con alzas superiores al 35%. Al igual que en los meses anteriores, Buenos Aires y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) también muestran subas, aunque menores al promedio nacional.
Los usados más elegidos
El modelo más elegido entre los autos de segunda mano sigue siendo el Volkswagen Gol, que pasó de 7.726 unidades en junio a 10.228 en el mes de julio, afirmando un liderazgo cada vez más acentuado en este particular mercado, donde la confiabilidad y el valor de reventa son cualidades esenciales para sostener un modelo durante tantos años.
Por la misma circunstancia, el segundo vehículo usado más vendido es la pick-up Toyota Hilux, que registró un total de 7.068 transferencias. En tercer puesto vuelve a aparecer el Chevrolet Corsa y su variante Classic con 5.327 unidades.
Las dos camionetas medianas que habitualmente se intercambian el cuarto lugar repitieron una performance similar a la del mes de junio, con la Ford Ranger delante de la Volkswagen Amarok, y cifras de 4.649 y 4.551 boletos respectivamente.
Detrás de ambas pick-up entra el mejor SUV usado desde hace muchos años, el Ford Ecosport, que superó al Peugeot 208, el Toyota Corolla, el Fiat Palio y el Ford Ka para completar los 10 modelos más buscados por los compradores de autos usados de Argentina.
Financiación: fuerte retracción en 0km, financiamiento limitado en usados
El sector de autos nuevos experimentó en junio y julio una caída en sus ventas financiadas, directamente asociada al encarecimiento de los créditos prendarios. El último reporte del Sistema de Información Online del Mercado Automotor de Argentina (SIOMAA) revela que en junio se inscribieron 24.502 prendas sobre vehículos 0km, lo que equivale a una retracción del 9,8% respecto a mayo, aunque muestra un aumento interanual del 88%. La participación de las ventas financiadas bajó del 48,8% en mayo al 47,2% en junio.
La tendencia para la venta de autos nuevos con financiación muestra signos de desaceleración en el corto plazo, impulsada por el encarecimiento del costo financiero. El acumulado semestral exhibe un crecimiento de 121% frente a los primeros seis meses de 2024, pero los datos recientes confirman la dificultad del público para acceder a líneas de crédito para la compra de 0km en un contexto de tasas de interés elevadas.
En el mercado de usados, la financiación presenta otro comportamiento. En junio, las prendas para transferencias de usados cayeron 20,4% respecto a mayo y 9,1% frente a junio 2024, representando apenas el 6,9% del total de transferencias, el registro más bajo desde abril de 2024. Sin embargo, en el acumulado anual la financiación de usados mejora 68,3% interanual, reflejando que pese al nivel bajo de los créditos, más compradores accedieron a planes de pago respecto al año anterior.
Según el informe de SIOMAA, el endurecimiento de las condiciones crediticias afectó más al segmento de autos nuevos, acentuando el traslado de la demanda hacia el sector de usados, que se mantuvo dinámico. El repunte de las ventas de usados responde también a la imposibilidad de muchos hogares para concretar la compra de un 0km, ya sea por falta de acceso al crédito o por los altos costos que supone una financiación a tasas elevadas.
A pesar de esta situación coyuntural, el sector confía en encontrar un equilibrio en los próximos meses. “Estamos convencidos que todavía hay mucho campo para desarrollar en el tema financiación; creemos que el futuro y la expansión del mercado vendrá por el lado de esta herramienta de vital importancia para el sector”, dijo Alejandro Lamas, secretario de la Cámara del Comercio Automotor.
Las expectativas de moderación de tasas y el eventual retorno del crédito podrían volver a equilibrar ambos segmentos más adelante, pero por ahora, el mercado de usados capitaliza el contexto restrictivo y consolida su crecimiento.