La Fiscalía de Francia informó este miércoles que el joven de 15 años acusado de asesinar con un cuchillo a una docente de una escuela en Nogent, en la víspera, no mostró señales de arrepentimiento y que su intención era “causar el mayor daño posible”, sin importar quién fuera la víctima.
El fiscal de Chaumont, Denis Devallois, explicó que durante su detención y el posterior interrogatorio, el adolescente se mostró “distante” y no expresó ningún tipo de arrepentimiento ni “compasión por las víctimas”.
“Dijo que el martes por la mañana, después del desayuno, agarró el cuchillo más grande que había en su casa” para “causar el mayor daño” posible, afirmó Devallios.
Según lo relatado por el fiscal en una rueda de prensa, el joven declaró que “actuó de esa manera porque ya no soportaba el comportamiento de los supervisores, los cuales, según él, tenían una actitud diferente según los estudiantes”. La víctima, que no era un objetivo específico del atacante, recibió hasta siete puñaladas.
Devallois añadió que el menor llevaba desde el sábado “dándole vueltas al plan de matar a un supervisor y, según sus propias palabras, a `cualquier supervisor’”. El fiscal también precisó que, por el momento, se descarta que el joven tenga algún trastorno mental.
Devallois también contó que el adolescente relató un episodio en el que era reprendido por un trabajador del centro por besar a su novia, si bien esta persona no fue quién finalmente sufrió el ataque de este martes.
“Parece haber perdido la noción del valor de la vida humana”, comentó Devallois, quien destacó que, a pesar de haber sido expulsado en dos ocasiones el año anterior por peleas con otros estudiantes, el joven era generalmente considerado como “sociable, casi un buen estudiante, integrado en la vida escolar”.
Por otro lado, las autoridades francesas decidieron prorrogar 24 horas más la detención provisional del sospechoso, quien contó estar fascinado por los “videojuegos violentos”. La víctima de 31 años fue atacada a primeras horas de la mañana, cuando se realizaba un control policial en las afueras del instituto, y aunque fue evacuada rápidamente, falleció poco después debido a las graves heridas.
Algunas autoridades políticas, como la presidente de Isla de Francia y ex candidata presidencial, Valérie Pécresse, defendieron la necesidad de aplicar medidas efectivas e inmediatas de carácter punitivo, tanto contra el agresor como contra la familia del mismo. “La pedagogía ya no es suficiente”, afirmó.
“La cuestión es el castigo”, dijo Pécresse en una entrevista este miércoles para BFMTV, en la que apostó también por sanciones económicas a las familias de los agresores y por dejar de inscribir en las escuelas a los “niños extremadamente violentos” ya que “no tienen cabida en clases normales”.
(Con información de AFP/EP)