El número de muertos por los ataques con misiles y drones lanzados por Rusia contra Kiev el jueves ascendió a 28, incluidos tres niños, informó este viernes el Ministerio del Interior de Ucrania.
La cifra anterior era de 16 fallecidos, pero fue actualizada luego de que “rescatistas retiraron 12 cuerpos de entre los escombros del edificio residencial en el distrito Sviatoshynsky, incluido el cuerpo de un niño de 2 años”, publicó la institución en su canal oficial de Telegram.
Además de los fallecidos, las autoridades informaron que 159 personas resultaron heridas, entre ellas 16 menores. El ataque fue uno de los más letales en la capital ucraniana desde el inicio de la ofensiva militar rusa a gran escala en febrero de 2022. Como respuesta, Kiev decretó un día de duelo este viernes en memoria de las víctimas.
En paralelo, la administración militar regional de Zaporizhzhia confirmó un nuevo ataque ruso la madrugada del viernes que causó una muerte adicional en esa ciudad del sureste de Ucrania. Las autoridades señalaron que los equipos de emergencia siguen trabajando en las zonas afectadas para rescatar a personas atrapadas y retirar escombros.
Tras el ataque, el ministro de Exteriores ucraniano, Andrí Sibiga, exigió el jueves la aplicación inmediata de sanciones internacionales contra Moscú. En un mensaje publicado en su cuenta oficial en X, denunció que “probablemente, sea hora de reducir a cero todos los plazos que se le han dado a Putin para que demuestre una actitud constructiva”.
Añadió: “Putin lo hace a propósito. No le importa ningún intento de poner fin a las matanzas. Solo busca destruir y matar”.
Sibiga calificó al presidente ruso de “criminal de guerra” y cuestionó la efectividad de los esfuerzos diplomáticos frente a los recientes ataques.
También criticó el plazo otorgado por Estados Unidos a Moscú para frenar la invasión. “Trump ha sido muy generoso y muy paciente”, escribió, en referencia al nuevo ultimátum de 10 o 12 días anunciado por el presidente estadounidense esta semana.
El mensaje alude a una advertencia previa emitida el 14 de julio, cuando Trump dio a Rusia 50 días para avanzar en un acuerdo de paz. Ante la falta de resultados, Washington redujo el margen y advirtió que impondrá nuevas sanciones si no hay un cambio de postura.
Por su parte, el presidente ucraniano, Volodimir Zelensky, también respondió al ataque del jueves y reiteró su llamado a endurecer las medidas contra el gobierno ruso. “Rusia debe sentir la fuerza del mundo libre. Y el mundo debe finalmente demostrar que es capaz de obligar a Rusia a hacer la paz. Capaz de devolver la seguridad. Capaz de proteger la vida. Capaz de actuar de verdad —no solo con palabras— para remover a Putin del poder y llevarlo ante la justicia”, declaró.
Desde Washington, Trump calificó los ataques rusos como “repugnantes”. “Rusia — creo que es repugnante lo que están haciendo. Creo que es repugnante”, afirmó el jueves ante periodistas.
El mandatario estadounidense no detalló cuándo ni cómo se aplicarían las nuevas sanciones, pero insistió en que su administración evalúa “opciones concretas” para responder al agravamiento del conflicto.
Según las autoridades ucranianas, los bombardeos del jueves destruyeron varios edificios residenciales en Kiev y causaron daños materiales en escuelas y hospitales.
(Con información de EFE)