Antes de la final de la Conmebol Sudamericana, Juan Fernando Quintero tuvo un noble gesto con dos hinchas de Racing en apuros - crédito ESPN y Agustín Marcarián/REUTERS

Luego de 36 años de sequía, Racing Club de Avellaneda conquistó un título internacional este sábado 23 de noviembre con la obtención de la Conmebol Sudamericana. La Academia superó en el estadio Defensores del Chaco de Asunción al Cruzeiro por 3-1 con goles de Gaston Martirena, Adrián Emmanuel ‘Maravilla’ Martínez, y el colombiano Roger Martínez, completando una notable campaña en la que el cuadro dirigido por Gustavo Costas dejó por el camino a rivales del calibre de Corinthians o Atlético Paranaense.

La celebración fue por todo lo alto, y tuvo en Juan Fernando Quintero a una de las figuras de la campaña. El volante de creación ex River Plate, se transformó así en el segundo colombiano tras Fabián Vargas en disputar las tres finales más importantes del fútbol sudamericano: la Copa Libertadores (que obtuvo con el cuadro de la Ribera en 2018), la Copa América (que perdió en julio con la selección Colombia ante Argentina) y ahora la Sudamericana.

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Quintero jugó 87 minutos de la final antes de ser sustituido por Santiago Solari, mostrando un buen rendimiento durante el compromiso, pero la historia que captó la atención de los televidentes tuvo lugar unas horas antes del partido, cuando Juanfer tuvo un bonito gesto con dos hinchas de Racing en problemas.

Juan Fernando Quintero jugó 87 minutos de la final, antes de ser sustituido por algunas molestias físicas - crédito Juan Mabromata/AFP

Mientras tenía lugar la previa del partido en el programa Sportscenter de ESPN, se dio a conocer el drama particular de un padre y su hijo que viajaron desde Argentina hasta Paraguay con las boletas comparadas para ver uno de los partidos más importantes en la historia del club de sus amores. Sin embargo, al llegar al estadio Defensores del Chaco se encontraron con la sorpresa de que sus boletas fueron anuladas, motivo por el que ya no podían entrar a ver el juego.

“Venimos de Ezeiza, 36 horas de viaje. La estamos pasando mal porque me cancelaron las entradas, las vendieron del lado de Brasil y no tengo nada. La verdad, esto es como Gustavo Costas”, expresó uno de los afectados.

Tras estas palabras, el hombre no pudo contener las lágrimas por la tristeza. “Desde muy chico soy hincha de Racing. Seguimos a Racing a todos lados y estoy muy triste porque pagué, pero nadie te presta atención acá. Esto no es por la plata, es un sentimiento, lo que se vive con el club, y ahora pasa esto, no poder llegar a verlo”, explicó el padre, visiblemente afectado.

Sin embargo, la historia dio un giro increíble apenas unos minutos después. Las cuentas oficiales de ESPN mostraron un nuevo video del padre y su hijo, esta vez con semblantes diferentes: contentos y relajados.

Ante las cámaras, el padre explicó que Quintero, al ver la historia en el canal deportivo, los contactó a través de su representante y les obsequió las boletas para que no se perdieran el gran partido. Nuevamente, afloraron las lágrimas mientras el padre narraba lo ocurrido, pero esta vez eran de pura felicidad.

“El representante de Juanfer nos dio la entrada. Más grande no puede ser ese muchacho, es lo más grande que hay. Ojalá nos llevemos el campeonato; para mí es muy importante disfrutarlo con mi hijo. Juanfer, lo grande que sos, el corazón que tenés. A pesar de todos los problemas que tuviste, le pusiste el pecho a Racing. Sos enorme, pibe. Ojalá algún día pueda darte un beso y un abrazo. Te quiero mucho sin conocerte. Sos un hijo más para mí. Te amo, querido. Gracias”, fueron las emotivas palabras del hombre para Juanfer, quien no se perdió la consagración de la Academia tras 36 años sin un título internacional.