Lo notable del caso es que no lo hayan hecho antes. El Power Hat de EcoFlow es exactamente lo que uno imagina: un sombrero de ala ancha cuya superficie es capaz de transformar la luz del sol en energía.
Pero no se trata de un panel solar convencional, rígido, como el que podemos ver en el techo de una casa. El Power Hat de EcoFlow usa un material flexible llamado PERC, que permite fabricar paneles solares monocristalinos que son muy delgados y blandos, y se pueden usar para el sombrero, que parece estar hecho de tela.
¿Para qué? Para cargar en 3 o 4 horas una batería de 4000 mAh, un poco menos que la capacidad completa de un smartphone moderno, que ronda los 4500 a 5000 mAh (aunque ahora están llegando al mercado baterías más grandes). Por supuesto, el tiempo real dependerá de múltiples factores, incluyendo la hora (al mediodía, con el sol en lo alto, impactará sobre más celdas del sombrero), la época del año y la latitud.
En cualquier caso, el sombrero tiene un conector USB-A (el rectangular clásico) y USB-C (el reversible que usan los smartphones) para ofrecer unos 12 watts de potencia cortesía de las celdas solares del sombrero, que pesa 370 gramos. Incluso es resistente al polvo y a las salpicaduras, algo no menor para un objeto de estas características. El sombrero no tiene batería propia, así que habrá que conectar una (o el celular) si no queremos desperdiciar energía del sol.
¿Precio? 129 dólares en Estados Unidos, y viene en dos tamaños. No será posible usarlo este verano, lamentablemente: saldrá a la venta a fin del invierno boreal, ideal para disfrutar de nuestra temporada primavera/verano 2026.