En los últimos cuatro meses, la Argentina registró la desaparición de cuatro mujeres en distintas provincias. Sofía Rocío Delgado, Verónica Jordán, Nallely García Servin y Luciana Muñoz desaparecieron en circunstancias aún no esclarecidas. La situación ha generado una fuerte movilización social, con familiares y allegados exigiendo respuestas, mientras las autoridades investigan cada caso bajo la presión de la incertidumbre y el paso del tiempo.
El caso más reciente es el de Sofía Rocío Delgado, de 20 años, quien fue vista por última vez el miércoles 30 de octubre en la ciudad de San Lorenzo, provincia de Santa Fe. Su desaparición fue reportada luego de que no regresara tras una breve salida nocturna para realizar una compra, habiendo recibido una transferencia de dinero de su pareja. La fiscalía de San Lorenzo, a cargo del fiscal Carlos Ortigoza, compartió detalles de la investigación con este medio, explicando que la señal del teléfono de Sofía fue detectada hasta las 23.20 de esa noche en antenas de San Lorenzo y Puerto General San Martín.
Las autoridades realizaron múltiples allanamientos en propiedades vinculadas a conocidos de la joven, incautando objetos personales y deteniendo a un hombre del entorno cercano de Sofía. En uno de los domicilios se hallaron prendas con posibles rastros biológicos que se están analizando, y la policía ha intensificado la búsqueda en ambas localidades con la esperanza de hallar nuevas pistas.
Mientras tanto, el gobierno de Santa Fe ha ofrecido una recompensa de cinco millones de pesos para quienes puedan proporcionar información que lleve al paradero de Sofía. “Cada día sin noticias es una angustia inmensa para su familia”, expresó una allegada de la joven a LA NACION, destacando la desesperación de la familia y el apoyo de la comunidad, que se ha unido en vigilias y marchas para exigir respuestas de las autoridades.
Verónica Jordán: búsqueda sin respuestas
La desaparición de Verónica Fabiana Jordán, financista de 54 años de Río Grande, Tierra del Fuego, ha dejado a su familia y a la comunidad con más preguntas que respuestas. Lo último que se sabe de ella es que fue captada por una cámara de seguridad el 3 de octubre, caminando sola por el barrio CAP durante la madrugada.
Su familia, en declaraciones a LA NACION, expresó que desde aquella noche no han recibido información oficial ni avances concretos en la investigación, y describen esta falta de noticias como “desgarradora”. En busca de apoyo, han solicitado la colaboración de la sociedad a través de las redes sociales y los medios, con el respaldo del activista Juan Carr, para visibilizar el caso y mantener activa la búsqueda.
La policía y el Juzgado de Instrucción N°1 de Río Grande han centrado sus esfuerzos en las áreas costeras del río Grande y han llevado adelante múltiples allanamientos en propiedades relacionadas con la inmobiliaria de Verónica, que ahora también está bajo investigación debido a denuncias de fraude. Estos operativos, realizados bajo la supervisión de la jueza a cargo, incluyeron la incautación de documentos y otros elementos en la sede de la inmobiliaria y en propiedades vinculadas a ella. La policía local informó a este medio que la documentación secuestrada podría ayudar a arrojar luz sobre las actividades de la empresa, pero, hasta el momento, no se han encontrado pruebas directas sobre el paradero de Verónica.
Santa Cruz, movilizada por Nallely
Nallely García Servin, de 15 años, desapareció el 23 de octubre en la localidad de Pico Truncado, Santa Cruz. Según información proporcionada a este medio por la policía provincial, la adolescente fue dejada por su madre en el instituto de inglés al que asistía, pero nunca ingresó a clases. En cambio, fue captada subiendo a la camioneta de su padrastro, Juan Ignacio Apaza, quien luego fue acusado de privación ilegítima de la libertad. La madre de Nallely ya había presentado una denuncia contra Apaza, tras descubrir indicios de una posible relación amorosa entre él y la adolescente.
Fuentes judiciales señalaron a LA NACION que Apaza y Nallely habrían dejado Pico Truncado el mismo día de su desaparición, y que la camioneta del sospechoso fue captada en controles de seguridad en las provincias de La Pampa y Córdoba, sugiriendo una ruta hacia el norte del país. En consecuencia, el juez Leonardo Cimini, a cargo del caso, emitió una orden de captura nacional para Apaza, y las fuerzas de seguridad han intensificado los operativos en la provincia de Salta, donde reside la familia del sospechoso.
Desde el Ministerio de Seguridad de Santa Cruz indicaron a LA NACION que el caso está siendo tratado como “prioritario” y que no se escatimarán recursos para localizar a la joven. Las fuerzas policiales están colaborando con Missing Children y el Sistema Federal de Búsqueda de Personas Desaparecidas y Extraviadas (SIFEBU), mientras que todos los puestos fronterizos del país han sido alertados para evitar una posible salida internacional del sospechoso con la menor.
Además de los operativos en territorio argentino, la Interpol ha sido notificada para sumar esfuerzos en el seguimiento del caso en las fronteras de los países vecinos.
100 millones por Luciana Muñoz
La desaparición de Luciana Muñoz, una joven de 21 años de Neuquén, ha sumido a su familia y a la comunidad en una angustia constante desde el 13 de julio, día en que fue vista por última vez tras salir de la casa de su abuela, con quien vivía. Según información proporcionada a este medio, Luciana había ido a encontrarse con un joven, quien luego confesó que había pasado la noche con ella. Desde entonces no se ha vuelto a tener noticias de la joven.
En el marco de la investigación, Maximiliano Avilés, expareja de Luciana, fue detenido y acusado de falso testimonio y de entorpecer la investigación. Las autoridades señalaron que las declaraciones iniciales de Avilés no coincidían con las imágenes de las cámaras de seguridad ni con testimonios adicionales. Según confirmaron fuentes judiciales a LA NACION, las últimas imágenes conocidas de Luciana la ubican caminando sola en una intersección de las calles 8 de Diciembre y 1 de Enero, en la madrugada del día en que desapareció.
Desde entonces, la policía ha intensificado los esfuerzos de búsqueda, llevando a cabo múltiples operativos de rastrillaje en zonas de difícil acceso, terrenos baldíos y áreas cercanas a ríos. En estas tareas han colaborado unidades de otras provincias, reforzando los recursos locales. Hasta el momento, sin embargo, no se han hallado rastros que puedan dar indicios sobre el paradero de Luciana.
En respuesta a la presión pública y al pedido desesperado de la familia, el gobierno de Neuquén incrementó la recompensa a 100 millones de pesos para quienes puedan aportar información concreta y verificable que permita esclarecer el caso. Además, se han realizado manifestaciones y marchas en Neuquén, convocadas por familiares, amigos y organizaciones sociales, exigiendo respuestas y avances en la investigación. “Cada día sin noticias es una herida abierta”, expresó la madre de Luciana durante una de las manifestaciones, reclamando mayor compromiso de las autoridades.
La incertidumbre de cuatro familias
A lo largo de estos cuatro meses, las familias de las desaparecidas han llevado a cabo diversas acciones para visibilizar los casos y mantener la presión sobre las autoridades. En Santa Fe, los familiares de Sofía Delgado han organizado vigilias y marchas para exigir su búsqueda y reclamar una mayor transparencia en las investigaciones. En Santa Cruz, la madre de Nallely García Servin ha solicitado ayuda pública a través de entrevistas y ha participado en las movilizaciones organizadas en Pico Truncado. Mientras tanto, la familia de Luciana Muñoz en Neuquén ha encabezado marchas y peticiones en los medios locales, cuestionando la lentitud del proceso judicial.
Estos casos también han generado preguntas sobre la efectividad de los sistemas de seguridad y búsqueda en distintas provincias del país. Las investigaciones en cada caso avanzan en distintas direcciones, y cada fiscalía ha implementado estrategias de rastreo que van desde el monitoreo de redes de celulares hasta el análisis de cámaras de vigilancia y operativos de búsqueda en zonas rurales y ribereñas.
La Fiscalía Regional 2 de Santa Fe, que está a cargo de la investigación en el caso de Sofía Delgado, informó a este medio que continúa la espera de los resultados de las pericias de las prendas incautadas.
En el caso de Verónica Jordán, en Tierra del Fuego, el Juzgado de Instrucción N°1 ha señalado que los allanamientos recientes no han aportado pruebas contundentes sobre su paradero, aunque se comprometieron a mantener los operativos activos en la ribera del río Grande.
En Santa Cruz, el juez Cimini señaló que los familiares del padrastro de Nallely están bajo vigilancia, y en Neuquén, las autoridades judiciales están revisando los últimos testimonios relacionados con Luciana Muñoz, quien, según confirmaron, tenía antecedentes de violencia en su entorno cercano, según lo señalado por testigos y allegados.