MAR DEL PLATA.– El combo de sol y calor es sinónimo de playa. Celebran los turistas que apostaron a este febrero que, a diferencia del arranque gris y frío que aquí tuvo el año, ostenta un inicio amigado con las altas temperaturas como pocas veces: dos de cada tres jornadas tuvieron máximas por encima de los 30 grados aquí en Mar del Plata.

Brillante el tiempo en general y muy positivo el movimiento de viajeros que, siempre con mayor foco en los fines de semana, le imprimieron una continuidad al impulso que la demanda de alojamiento y servicios había logrado durante las últimas tres semanas de enero.

Cuando llovió de verdad, fue de noche. La madrugada del martes pasado se vivió un “temporalito” que llegó con aguacero potente, granizo y vientos que dejaron unos cuantos árboles caídos, algunos de ellos sobre vehículos estacionados.

La conformidad que se advierte por lo vivido en estos días se choca con la certeza de que lo mejor ya pasó: en un par de semanas comienza el ciclo lectivo en algunos distritos del país, pero ya a partir de este lunes los docentes y directivos vuelven a la actividad y en pocos días arrancan las mesas de examen. El impacto ya se viene notando en niveles de consultas y reservas en hoteles e inmobiliarias. “La segunda quincena es un mar de dudas”, admitieron a LA NACION distintos operadores del rubro.

Playa Grande, otro punto congregante en Mar del Plata, con gran afluencia este febrero

Por eso, al momento de hacer números, este primer tramo del mes sacará ventajas. Las estadísticas oficiales del Ente Municipal de Turismo y Cultura (Emturyc) recién se conocerán este martes, pero, según pudo confirmar LA NACION, los datos que allí se recibieron permitirían confirmar que este primer tercio del mes estará por encima de mismo período del año pasado. “Un 2% o 2,2%”, arriesgaron.

Fuentes de la Asociación Empresaria Hotelera Gastronómica de Mar del Plata sostuvieron en diálogo con este medio que tanto el fin de semana anterior, en el arranque de mes, como en el actual se lograron altos niveles de ocupación. Casi 85% en el primero y 75% en este que empieza a despedirse.

Explicaron además que no se puede obviar la incidencia que tuvo la ola de calor que se vive desde fines de enero en gran parte del país. Pero sobre todo la Capital, el territorio bonaerense y provincias más próximas a la costa atlántica. La alternativa a ese horno estuvo para muchos en estas playas, también calurosas, pero con el mar como respiro y alivio.

Este arranque de mes es un buen aporte, pero también hay una realidad: el balance final de febrero perderá contra lo vivido en 2024, cuando la suma incluyó el siempre espléndido resultado que tiene el fin de semana extralargo de Carnaval. Este año esos feriados llegarán recién en los primeros cuatro días de marzo y ya está moviendo el mercado, con reservas y también programación de espectáculos.

Dos de cada tres jornadas tuvieron temperaturas por encima de los 30 grados en lo que va del mes

Pero si un dato positivo tiene esta temporada es que se logró extender parte de la dinámica de enero a esta primera semana y algo más de febrero. Este sábado por la tarde, sobre la playa, fueron miles los que disfrutaron de un improvisado pero muy festejado recital de Ciro Martínez en el escenario de Mute, el parador que acaparó la movida joven con sus fiestas electrónicas y despidió su ambiciosa grilla con este after a puro baile. Un rato después, en el polideportivo Islas Malvinas, a capacidad completa, se vivió el recital de Diego Torres. Y este domingo por la noche, como parte de los festejos del 151° aniversario de la ciudad de Mar del Plata, con acceso libre y gratuito, en el céntrico parador Las Toscas cerrará la noche el cuartetero cordobés Luck-Ra, en un programa que incluirá participación previa de bandas de la ciudad.

Esta constante del buen tiempo significó una suerte de oportunidad de compensación para los que viven de servicios al aire libre. En particular los balnearios, que padecieron una seguidilla de mal tiempo que abarcó casi todo diciembre y la primera semana de enero. Los concesionarios se quedaron durante esos días sin chance de alquiler de sombrillas y carpas, y los comercios que allí funcionan ni siquiera tuvieron a los clientes de temporada, que ni se arrimaban al mar entre tantos nubarrones, tardes frescas y lluvias.

En medio de esa dificultad para disfrutar de la playa se generaban algunos números que también dan cuenta de que lo que faltaba era sol, porque turistas y consumo daban indicios más allá de las playas. Se acaba de conocer un informe de la Unión del Comercio, Industria y Producción (UCIP) de Mar del Plata que revela un crecimiento de ventas durante enero del 7,4% con respecto al mismo período del año anterior.

Pinamar también celebra el buen arranque de febrero

Otros destinos

Lucas Ventoso, director de Turismo de Pinamar, confirmó que esta ola de buen movimiento turístico de inicios de febrero dio muy buenas señales también en los destinos de ese partido costero. “Estamos mejor que el año pasado para esta época y se dio algo que habíamos vivido antes: el cambio de mes, que se dio en fin de semana, no se notó”, dijo a LA NACION.

Incluso en distritos que habían sido más críticos, con críticas previas al impacto de las medidas y la situación económica en el país, reconocen que tras aquel comienzo de temporada fallido los arribos crecieron y se sostuvieron. En Villa Gesell, por ejemplo, registraron un buen cierre de enero y un balance general positivo hasta ahora. “A pesar del difícil momento económico que atraviesan los argentinos, Villa Gesell viene teniendo una buena temporada”, declaró la directora de Turismo de ese distrito, Natalia Megías.

Lo que se espera de aquí en más es que, siempre y cuando el buen tiempo siga haciendo lo suyo, asomen los que puedan aprovechar algunas promociones con precios rebajados o algunas bonificaciones. Un clásico que coincide con tiempos de góndolas de supermercados que se llenan de guardapolvos y útiles escolares, donde hasta hace unos días nomás se ofrecían reposeras y protectores solares.