Las fechas del Carnaval 2025 ya están definidas y todos los interesados ya pueden saber cuándo son estos días de descanso que configuran el primer fin de semana largo del año entrante.
Esta festividad tradicional es esperada con ansias, ya que, por fuera del asueto del 1° de enero, son los primeros feriados nacionales que tiene el año. Además, su fecha cambia año tras año, ya que son las jornadas que anteceden a la Cuaresma y la celebración católica de la Pascua, la cual se calcula siguiendo los ciclos lunares.
Se trata de la despedida de los excesos y placeres carnales, antes de que empiecen los días frugales en que los cristianos emulan los hábitos de Jesucristo, en la mencionada Cuaresma. Estas jornadas concluyen a los 40 días de concluido el Carnaval, cuando se celebra la resurrección de Cristo con la jornada de Pascua, que culmina a su vez la Semana Santa.
Cuándo es el Carnaval 2025
El año que viene, el lunes y martes de Carnaval van a caer el 3 y el 4 de marzo. En estas dos jornadas habrá sendos feriados, que harán que la mayoría de las personas no trabaje hasta el quinto día del segundo mes del año.
Los días de Carnaval cuentan con celebraciones, murgas y desfiles en todo el país, especialmente en Gualeguaychú, Entre Ríos, considerada la capital nacional de este festejo. También la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) tiene una tradición de corsos en distintos barrios porteños, con epicentro en la zona de Boedo.
Al tratarse de feriados nacionales garantizados por ley, las personas que sean convocadas a su puesto de trabajo deberán cobrar el doble de una jornada regular, como define la Ley de Contrato de Trabajo.
El origen del Carnaval en la Argentina
El carnaval, como otras celebraciones nacionales, fue introducido en el territorio argentino por la población de origen español, según recuerda el Ministerio de Cultura de la Nación. A su vez, la tradición en el país ibérico y en Europa en general viene de la celebración que antecede a la Cuaresma cristiana, período de preparación y ayuno previo a la fiesta de la Pascua.
Desde los tiempos de las colonias, los festejos del Carnaval, asociados a los bailes de máscaras, tenían su epicentro en la primera sala teatral de Buenos Aires, la Casa de Comedias, llamada popularmente la Ranchería y ubicada en las actuales esquinas de Perú y Alsina. En Gualeguaychú, la otra capital del carnaval en el país, la primera autorización para esta celebración se otorgó en 1840.
En ese entonces eran comunes los tradicionales juegos en la calle, en los que los niños y adultos se arrojaban agua mezclada con distintos ingredientes, según el vínculo con el otro: lavanda para los amigos y sal para los rivales.
Mientras que estas fiestas iniciales estaban atravesadas por las costumbres criollas, la llegada del siglo XX y los inmigrantes italianos y españoles de la nueva generación provocaron un cambio en la dinámica de esta fiesta: el comienzo de la murga.
Luego, la fiesta carnavalesca quedó en pausa de manera oficial durante el gobierno de facto del autodenominado Proceso de Reorganización Nacional (1976-1983), que prohibió este tipo de festejos.
La vuelta de la democracia permitió que las murgas que quedaban regresaran a las calles y ganaran impulso nuevamente en los barrios. Luego, en 2010, la restitución oficial de los feriados nacionales del lunes y martes de Carnaval apuntaló definitivamente esta expresión cultural que dará dos días de descanso el año que viene.