El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) es responsable de gestionar la salida de personas que no cumplen con los requisitos legales para permanecer en Estados Unidos. Los términos deportación, remoción y retorno voluntario se utilizan en distintos contextos y tienen consecuencias diversas para quienes atraviesan estos procesos.

¿Qué es la deportación?

La deportación es un término coloquial que se refiere al proceso mediante el cual una persona no ciudadana es obligada a salir de EE.UU. debido a una violación de las leyes migratorias. Este proceso puede ser iniciado por el ICE o por un juez de inmigración y generalmente conlleva restricciones severas para el reingreso a ese país.

A través de una orden de deportación, una persona no ciudadana es obligada a salir de EE.UU.

De acuerdo con el Instituto de Política Migratoria (MPI, por sus siglas en inglés), una persona puede ser deportada por diversas razones:

  • Ingresar al país sin autorización
  • Permanecer más tiempo del permitido por una visa
  • Cometer delitos graves
  • Violar los términos de su estatus migratorio

Una vez que se emite una orden de deportación, la persona está legalmente obligada a abandonar el territorio estadounidense y puede enfrentar prohibiciones de reingreso que van desde cinco años hasta una prohibición permanente, según las circunstancias del caso.

¿Qué es la remoción?

MPI aclara que la remoción es el término legal utilizado para describir la salida obligatoria de una persona no ciudadana de EE.UU. Puede ser ordenada por un juez de inmigración después de un procedimiento judicial o mediante un proceso administrativo conocido como “remoción expedita”.

La remoción expedita es un procedimiento acelerado que aplica a personas con menos de dos años de residencia en EE.UU. y que no tienen estatus legal ni han solicitado protección internacional. A diferencia de un proceso judicial, este ofrece menos garantías de debido proceso, lo que significa que la persona no tiene derecho a una audiencia ante un juez.

De acuerdo con MPI, actualmente, hay más de 1,5 millones de personas con órdenes de deportación pendientes en Estados Unidos

Una orden de remoción puede ser ejecutada tanto en la frontera como en el interior de EE.UU. Sin embargo, es importante destacar que no todas las órdenes resultan en una deportación inmediata.

Actualmente, según MPI, alrededor de 1,5 millones de personas no ciudadanas tienen órdenes de remoción pendientes, pero no han sido repatriadas debido a la falta de cooperación de sus países de origen u otras condiciones, como los retrasos en los procesos judiciales.

¿Qué es el retorno voluntario?

El retorno voluntario, también conocido como salida voluntaria, es una opción que permite a una persona no ciudadana salir de EE.UU. por su propia cuenta, lo que evita una orden formal de remoción. Esta opción suele ser más favorable, ya que no conlleva las mismas restricciones de reingreso que una deportación.

Para ser elegible para la salida voluntaria, el individuo debe solicitarla durante el procedimiento de deportación, demostrar que tiene los medios económicos para salir de ese país y cumplir con los requisitos establecidos por un juez de inmigración.

Si este no abandona el territorio estadounidense antes de la fecha designada, la salida voluntaria se convierte automáticamente en una orden de deportación, lo que puede resultar en una prohibición de reingreso de hasta 10 años.

Este proceso también puede aplicarse en la frontera, donde la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos (CBP, por sus siglas en inglés) puede ofrecer a una persona no ciudadana la opción de regresar voluntariamente a su país de origen en lugar de someterse a un proceso de expulsión acelerada.

El retorno voluntario le permite a las personas no ciudadanas regresar por voluntad propia a su país de origen antes de que se emita una orden de deportación

Diferencias clave entre deportación, remoción y retorno voluntario

Naturaleza del proceso

  • Deportación: es una expulsión forzada ordenada por las autoridades migratorias.
  • Remoción: es un término legal que incluye tanto la deportación como otros procesos de salida obligatoria.
  • Retorno voluntario: es una opción que permite a la persona salir del país por su propia cuenta.

Consecuencias legales

  • Deportación: conlleva restricciones de reingreso que pueden ser severas, dependiendo de las circunstancias del caso.
  • Remoción: puede resultar en una prohibición de reingreso, aunque no siempre se ejecuta de inmediato.
  • Retorno voluntario: no genera una orden formal de deportación, lo que facilita el reingreso en el futuro si se establece una base legal.

Proceso administrativo

  • Deportación y remoción: requieren la intervención de un juez de inmigración o de las autoridades migratorias.
  • Retorno voluntario: depende de la solicitud de la persona y de la aprobación de un juez de inmigración.

¿Quiénes pueden ser sujetos de deportación o remoción?

Cualquier persona no ciudadana puede ser sujeto de deportación o remoción si viola las leyes migratorias. Esto incluye:

  1. Inmigrantes indocumentados: personas que ingresaron al país sin autorización o permanecieron más tiempo del permitido por su visa.
  2. Titulares de visas temporales: aquellas que violaron los términos de su visa, como trabajar sin autorización.
  3. Residentes permanentes: titulares de la “green card” que han cometido delitos graves o violado las condiciones de su estatus migratorio.

Aunque personas con protecciones temporales, como el Estatus de Protección Temporal (TPS, por sus siglas en inglés) o la Acción Diferida (DACA, por sus siglas en inglés) generalmente no son sujetos de deportación, estos estatus pueden ser revocados, lo que los expone a la expulsión.