BEIRUT.— Israel bombardeó decenas de sucursales de una institución financiera vinculada a Hezbollah el domingo por la noche en Beirut, el sur de Líbano y el valle de la Bekaa. Aunque no se registraron víctimas, se informó que cientos de residentes habían huido de sus hogares tras las múltiples explosiones registradas en la capital libanesa.
Un alto funcionario de inteligencia israelí afirmó que los ataques tendrían como objetivo al-Qard al-Hassan en todo el Líbano. “El objetivo de este ataque es atacar la capacidad de funcionamiento económico de Hezbollah tanto durante la guerra como después, para reconstruirse y rearmarse… el día de después”.
La Agencia Nacional de Noticias del Líbano informó de 11 ataques en los suburbios del sur de Beirut y otros en sucursales en el este del país.
Al-Qard Al-Hassan es utilizado por la gente común del Líbano, pero también está acusado de ayudar a financiar a Hezbollah. Al-Qard Al-Hassan es una empresa financiera que ofrece microcréditos en Líbano, donde el sistema bancario tradicional se desplomó hace cinco años al comienzo de una crisis económica. Está sancionada por Estados Unidos, que acusa a Hezbollah de utilizarla como pantalla para enmascarar las actividades financieras del grupo y obtener acceso al sistema financiero internacional. Israel afirma que se utiliza para pagar a los operativos del grupo militante y para ayudar a comprar armas.
También se informó de que un ataque cayó cerca del aeropuerto de Beirut, el principal punto de entrada de asistencia humanitaria al Líbano y un centro de evacuación clave para quienes huyen del conflicto.
Al-Qard al-Hassan dijo que la decisión de atacarlo era una señal de la “bancarrota” de Israel y aseguró a los clientes que había tomado “medidas” para garantizar que su dinero estuviera seguro.
Israel invadió Líbano a principios de este mes , afirmando que su objetivo es expulsar a Hezbollah de la frontera después de más de un año de ataques con cohetes, misiles y drones que comenzaron después de que militantes palestinos de Hamas lanzaran su sorpresivo ataque el 7 de octubre de 2023 contra Israel desde la Franja de Gaza. Los ataques aéreos israelíes golpearon amplias zonas del Líbano durante semanas, obligando a más de un millón de personas a huir de sus hogares.
Estados Unidos espera reanudar los esfuerzos diplomáticos para resolver ambos conflictos tras el asesinato del líder de Hamas, Yahya Sinwar, en la Franja de Gaza la semana pasada, pero hasta ahora todas las partes parecen estar atrincheradas.
Este lunes, el tráfico aéreo fue brevemente interrumpido en el aeropuerto Ben Gurión de Tel Aviv, según afirmaron las autoridades aeroportuarias, sin especificar los motivos de esta decisión. Según el sitio web de noticias Ynet, que cita a estas autoridades, “la Fuerza Aérea pidió detener los despegues y aterrizajes durante media hora, aparentemente después de detectar un objeto sospechoso”.
El prestamista dirigido por Hezbollah
El vocero en lengua árabe del ejército israelí, Avichay Adraee, afirmó que Hezbollah almacena cientos de millones de dólares en las sucursales de esta entidad financiera, sin proporcionar pruebas, y que los ataques tenían como objetivo impedir que el grupo se rearmara.
La institución tiene más de 30 sucursales en todo el Líbano y trató de tranquilizar a los clientes diciendo que había evacuado todas las sucursales y reubicado el oro y otros depósitos en zonas seguras.
Muchos de sus clientes son civiles que no tienen ninguna relación con Hezbollah. La organización sin fines de lucro, sirvió durante mucho tiempo como alternativa a los bancos del Líbano, que impusieron restricciones ante una grave crisis financiera que comenzó en 2019.
En el lugar de uno de los ataques, las excavadoras despejaron montones de escombros. Entre los escombros se encontraron ropa, muebles y los restos de un salón de belleza. Había documentos de Al-Qard al-Hassan esparcidos por la zona, pero no había señales de dinero en efectivo ni otros objetos de valor.
“Ya no es suficiente”
El enviado estadounidense Amos Hochstein, que pasó gran parte del año pasado intentando negociar un alto el fuego entre Israel y Hezbollah, regresó al Líbano el lunes para mantener conversaciones con altos funcionarios.
Dijo que la Resolución 1701 del Consejo de Seguridad de la ONU, que puso fin a la guerra de 2006 entre Israel y Hezbollah, “ya no era suficiente” para garantizar la paz y que se necesitaba un nuevo mecanismo para hacerla cumplir.
La resolución pedía que Hezbollah se retirara de la frontera con Israel y que las fuerzas de paz de la ONU y el ejército libanés controlaran el sur del Líbano, sin ninguna presencia de Hezbollah o de Israel.
Israel sostiene que la resolución nunca se implementó y que Hezbollah construyó una amplia infraestructura militar hasta la frontera. El Líbano acusa desde hace tiempo a Israel de violar su espacio aéreo y de no cumplir otras disposiciones de la resolución.
“La ley 1701 logró poner fin a la guerra en 2006, pero debemos ser honestos: nadie hizo nada para implementarla”, dijo Hochstein después de reunirse con el presidente del Parlamento libanés, Nabih Berri, un aliado político de Hezbollah que participa en las conversaciones de alto el fuego.
Por otra parte, el ejército israelí se disculpó por un ataque del domingo en el sur del Líbano en el que murieron tres soldados del ejército libanés. Afirmó que el objetivo era un vehículo en una zona que Hezbollah había utilizado recientemente para realizar ataques sin percatarse de que pertenecía al ejército libanés.
Terrorismo móvil: Hezbolá almacena sus lanzadores de cohetes en sus vehículos, preparados para disparar cohetes hacia comunidades israelíes. pic.twitter.com/2FCZL4h0Ml
— FDI (@FDIonline) October 21, 2024
El ejército libanés es una institución respetada en el país, pero no es lo suficientemente poderoso como para imponer su voluntad a Hezbollah o defender al Líbano de la invasión israelí. El ejército se ha mantenido en gran medida al margen mientras Israel y Hezbollah han intercambiado golpes durante el año pasado.
EE.UU. busca reactivar las negociaciones del alto el fuego
Estados Unidos ha expresado su esperanza de que el asesinato del líder de Hamas, Sinwar, pueda dar un nuevo impulso a un alto el fuego en Gaza, lo que daría un importante impulso a los esfuerzos paralelos para detener los combates en el Líbano.
El jefe de la agencia de seguridad israelí Shin Bet, Ronen Bar, visitó Egipto por segunda vez en menos de una semana y tuvo una reunión de varias horas con funcionarios egipcios el domingo, según un funcionario egipcio que habló bajo condición de anonimato.
🚨🇮🇱🇪🇬The director of Shin Bet Ronen Bar visited Cario on Sunday and met with the new Egyptian intelligence chief Hassan Mahmoud Rashad, a source briefed on the details told me
🤔Why it matters: This was Rashad's first meeting with an Israeli official and it took place less than…— Barak Ravid (@BarakRavid) October 20, 2024
El funcionario dijo que Egipto, un mediador clave entre Israel y Hamas, sigue oponiéndose a cualquier presencia israelí a lo largo de la frontera entre Gaza y Egipto, un punto clave en las conversaciones que se estancaron en agosto.
Hamas afirmó que sus exigencias no han cambiado tras el asesinato de Sinwar. El grupo militante dijo que sólo liberará a decenas de rehenes israelíes a cambio de una retirada israelí de Gaza, un alto el fuego duradero y la liberación de un gran número de prisioneros palestinos.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, prometió destruir a Hamas y recuperar a todos los cautivos, y dice que Israel debe mantener una presencia de seguridad abierta en Gaza para evitar que Hamas se vuelva a armar.
Israel ha estado llevando a cabo una importante operación en el norte de Gaza, la parte más afectada del territorio, durante más de dos semanas, y sus fuerzas regresaron repetidamente a otras áreas de Gaza después de decir que Hamas se había reagrupado.
Los médicos palestinos dijeron el lunes que habían recogido más de una docena de cadáveres de personas que murieron en la operación aérea y terrestre que Israel está llevando a cabo en el norte de Gaza. Entre ellos había seis hombres que murieron la madrugada del lunes cuando intentaban conseguir agua potable en el campo de refugiados urbano de Jabaliya, el principal foco de la operación, según el Ministerio de Salud de Gaza.
Otras cuatro personas, incluidas dos mujeres, murieron en un ataque contra una zona de refugio para desplazados en Jabaliya, según el ministerio. Otras tres personas murieron en un ataque contra una escuela convertida en refugio en la ciudad fronteriza de Beit Hanoun.
Agencias AP y Reuters