Mauro Bertolini, médico infectólogo y miembro de la Unidad de Coordinación de Dengue del Ministerio de Salud de la Nación, presentó ayer una nueva herramienta que promete optimizar la respuesta ante los brotes de la enfermedad en la Argentina. El monitor interactivo, un desarrollo interno de la cartera sanitaria, permite tomar los datos de Sistema Nacional de Vigilancia de la Salud y visualizar casi en tiempo real la situación epidemiológica de la infección en todo el país, con la posibilidad de detectar tendencias de manera temprana y gestionar la respuesta en las jurisdicciones afectadas. Según informó Bertolini, este tablero no estará abierto al público ni a la prensa y funcionará exclusivamente como insumo interno del ministerio y las autoridades de las provincias, con el objetivo de acelerar la toma de decisiones en áreas clave.
El funcionario explicó que el monitor es parte de un esfuerzo más amplio de “reordenamiento del sistema de salud” en el marco del Plan Integral de Dengue, una estrategia anunciada recientemente y trabajada en conjunto con los ministros de Salud de las distintas jurisdicciones del país. La creación de esta herramienta responde a la necesidad de una gestión más ágil y completa de los datos epidemiológicos relacionados con el dengue, permitiendo a los equipos técnicos del ministerio tener un control más preciso y actualizado de los casos en tiempo real.
Previamente, las salas de situación funcionaban en un esquema estático, donde la información era reportada y consolidada, pero con demoras significativas en su procesamiento y análisis, afirmó Bertolini. “Anteriormente, la información se extraía del Boletín Epidemiológico Nacional, lo cual generaba un retraso de aproximadamente dos semanas. Ahora, con este tablero, logramos reducir el desfase temporal y disponer de datos actualizados semanalmente”, indicó el infectólogo.
De acuerdo con Bertolini, esta herramienta no solo reúne datos de casos sospechosos y confirmados, sino que permite también integrar información sobre el manejo de vectores y la distribución geográfica de los casos en distintas escalas, desde la región hasta la localidad específica.
“Lo que conseguimos es visualizar la situación actual y compararla con los patrones históricos”, dijo. El año pasado y a principios de este se registró uno de los brotes más intensos de la enfermedad; el tablero permite tomar como referencia esos datos para establecer comparaciones semanales y detectar aumentos o tendencias inusuales en la cantidad de casos. Asimismo, el monitor presenta alertas automatizadas que avisan cuando en una región determinada se observan aumentos sostenidos de casos sospechosos durante tres semanas consecutivas, lo cual activa protocolos internos para fortalecer la respuesta en esas zonas.
En palabras de Bertolini, esta mejora en los tiempos es crucial: “Ganar una semana parece poco, pero marca una gran diferencia al poder activar acciones en terreno con anticipación, lo cual es fundamental para limitar la propagación del virus y proteger a la población”. El sistema, agregó, permite identificar rápidamente focos de contagio y comunicar los hallazgos a las autoridades sanitarias provinciales, facilitando una coordinación más ágil y efectiva.
El protocolo incluye el contacto directo con las jurisdicciones para coordinar las intervenciones en las áreas afectadas y garantizar que los recursos se apliquen de manera estratégica. Según Bertolini, “desde el momento en que se notifica un caso, se cuenta con un lapso de aproximadamente diez días para implementar acciones efectivas en el terreno, lo cual puede marcar la diferencia en el control del brote”.
El tablero presenta la información de manera interactiva, permitiendo a los usuarios autorizados navegar por diferentes criterios, como región, grupo etario, casos confirmados o sospechosos, entre otros. Esta capacidad de personalización, expresó el funcionario, es esencial para que las áreas técnicas del ministerio que conduce Mario Lugones puedan profundizar en la situación específica de cada jurisdicción y determinar qué intervenciones son más necesarias en cada caso. Los datos también se comparan con los de años anteriores, especialmente con los patrones de contagios del brote de la temporada 2023/2024, facilitando una evaluación en tiempo real de cómo evoluciona la situación actual en comparación con la experiencia previa.
Implementación y expectativas
Este monitor, señaló Bertolini, fue presentado en el último Consejo Federal de Salud (Cofesa) ante los ministros de Salud de todas las provincias, quienes podrán acceder a los datos correspondientes a sus respectivas jurisdicciones. Según el infectólogo, esta “democratización de la información” entre los distintos niveles de gestión sanitaria permite que las áreas técnicas de las provincias y los municipios tengan una visión completa de la situación del dengue en su región y puedan implementar las medidas necesarias de manera oportuna.
Aunque el tablero representa un avance en términos de eficiencia y control, Bertolini aclaró que su implementación aún está en fase de ajuste, con algunos aspectos en proceso de refinamiento. La herramienta ya está siendo utilizada en las salas de situación del Ministerio de Salud, donde los funcionarios pueden analizar los datos en tiempo real y discutir las acciones prioritarias junto a los representantes de las distintas áreas técnicas.