Las placas de los vehículos en México, también conocidas como matrículas, cumplen una función esencial en la identificación de los automóviles y su circulación legal. A pesar de que cada ciudad puede incorporar características y diseños únicos para reflejar su identidad local, todas las placas mexicanas deben seguir ciertos lineamientos nacionales. Estas reglas no solo garantizan la coherencia, sino que también facilitan la identificación de origen del mismo dentro de ese país.
En 2023, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), la cantidad de vehículos registrados en México ascendió a 58.199.293, lo que representa un aumento significativo en comparación con los registros de 2001. Este crecimiento hace que las matrículas sean más importantes que nunca para la identificación del automotor.
¿Qué información contienen las placas mexicanas?
Las chapas vehiculares en México están reguladas por la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), que establece las normativas a través de la Norma Oficial Mexicana “NOM-001-SCT-2″. Aunque se revisa periódicamente, la última actualización fue en 2016. En ella se detallan los aspectos esenciales que deben cumplir todas las matriculas, sin importar el estado del país.
Estas son rectangulares, miden 30 centímetros de largo y 15 centímetros de ancho, y tienen las esquinas redondeadas. Los números y letras que aparecen están troquelados, y la serie alfanumérica varía según el tipo de vehículo. Además, cada una incluye el nombre de la ciudad o una abreviatura oficial, la vigencia de la misma, y ciertos códigos de seguridad que dificultan su falsificación.
Códigos y series de las placas en México
Las placas mexicanas contienen una serie de letras y números que permiten identificar de dónde proviene el vehículo. Para los automóviles particulares, la serie suele comenzar con tres letras seguidas de tres o cuatro números. En cambio, para los camiones privados, suelen tener dos letras seguidas de cinco o cuatro números.
Cada ciudad del país tiene asignadas combinaciones específicas de letras, lo que facilita la identificación del origen del vehículo. Por ejemplo:
- Aguascalientes: utiliza la abreviatura AGS o AS.
- Baja California: se identifica con BC.
- Ciudad de México: usa CDMX o CM.
- Baja California Sur: BCS o BS.
- Campeche: CAMP o CC.
- Coahuila: COAH o CL.
- Chihuahua: CHIH o CH.
- Durango: DGO o DG.
- Guanajuato: GTO o GT.
- Guerrero: GRO o GR.
- Hidalgo: HGO o HG.
- Jalisco: JAL o JC.
- Estado de México: MEX o MC.
- Michoacán: MICH o MN.
- Nuevo León: NL o NL.
- Oaxaca: OAX o OC.
- Puebla: PUE o PL.
- San Luis Potosí: SLP o SP.
- Sinaloa: SIN o SL.
- Sonora: SON o SR.
- Veracruz: VER o VZ.
- Yucatán: YUC o YN.
De esta manera, es posible determinar de qué parte de México proviene un auto solo con ver su matrícula. Las abreviaciones para el resto de los lugares se encuentran especificadas en la Norma Oficial Mexicana “NOM-001-SCT-2″.
¿Cómo identificar la ciudad de origen de las placas?
Además de las series alfanuméricas y las abreviaturas específicas, las matrículas mexicanas también incluyen otros elementos visuales que ayudan a identificar el lugar de origen. Muchas muestran el nombre completo de la ciudad o su abreviatura, y también pueden incorporar gráficos, paisajes o símbolos que representan características locales.
Por ejemplo, algunas placas de sitios turísticos como Quintana Roo o Jalisco pueden incluir imágenes de playas o monumentos. Además, tienen impresos códigos de barras y otros elementos de seguridad que permiten a las autoridades verificar su autenticidad.
¿Cómo están organizadas las placas en México?
Desde 1998, cada estado mexicano tiene la libertad de diseñar sus propias matrículas, incorporando elementos visuales representativos, como colores y símbolos asociados a la cultura o lugares emblemáticos de cada región. Sin embargo, aunque los diseños varían, todos deben cumplir con los requisitos técnicos establecidos por la SCT, como las dimensiones, el tipo de material y las características de seguridad.
El diseño está vinculado al tipo de vehículo y existen más de 30 tipos de placas diferentes en México, desde automóviles particulares hasta vehículos de transporte, carga y camiones. Las motos, por ejemplo, tienen matrículas más pequeñas, con dimensiones de 215 mm por 134 mm.
El formato de código alfanumérico utiliza la secuencia AAA-000-A para vehículos privados y A-000-AAA para aquellos públicos. Los transportes comerciales, autobuses, camiones y remolques tienen sus propias combinaciones de letras y números, diferenciadas de las de los particulares.