WASHINGTON.- La oficina presupuestaria del presidente Donald Trump revocó la orden que había dado de congelar las ayudas federales, tras dos días de confusión y demandas judiciales en diversas partes del país, confirmaron varios medios al citar fuentes familiarizadas con el asunto.
La orden de la Oficina de Administración y Presupuesto de la Casa Blanca (OMB, por sus siglas en inglés) había desatado incertidumbre sobre la financiación de estados, escuelas y otras organizaciones públicas que dependen de billones de dólares de Washington.
La controversia dejó a la Casa Blanca en apuros para explicar qué estaría y qué no estaría sujeto a la suspensión de los financiamientos.
La OMB retiró la orden el miércoles en un aviso de dos frases a las agencias y departamentos. Matthew J. Vaeth, director en funciones de la OMB, envió el miércoles una notificación a las agencias federales en la que les comunicaba que el memorando que congelaba la ayuda había sido “rescindido”.
“Si tiene alguna pregunta sobre la aplicación de las órdenes ejecutivas del presidente, póngase en contacto con el asesor general de su agencia”, dijo Vaeth en la notificación.
Karoline Leavitt, secretaria de prensa de la Casa Blanca, envió por correo electrónico una declaración tras la retractación del memorando de financiación, según publicó The New York Times. “A la luz de la orden judicial, la OMB ha rescindido el memorando para poner fin a cualquier confusión sobre la política federal creada por el fallo judicial y la cobertura deshonesta de los medios de comunicación. Las órdenes ejecutivas emitidas por el presidente sobre las revisiones de financiación siguen plenamente vigentes y serán aplicadas rigurosamente por todas las agencias y departamentos. Esta acción debería poner fin de forma efectiva al proceso judicial y permitir que el gobierno se centre en hacer cumplir las órdenes del presidente sobre el control del gasto federal. En las próximas semanas y meses, más medidas ejecutivas seguirán poniendo fin al atroz despilfarro de fondos federales”, señaló.
Los demócratas rápidamente celebraron la revocación. “Esta es una victoria importante para el pueblo estadounidense cuyas voces fueron escuchadas después de una presión masiva desde cada rincón de este país. Personas reales hicieron la diferencia al expresarse”, dijo la senadora demócrata Patty Murray.
“Aún así, la administración Trump, mediante una combinación de pura incompetencia, intenciones crueles y un desprecio deliberado por la ley, causó un daño real y caos para millones durante las últimas 48 horas que aún continúa”, añadió Murray.
La directiva inicial interrumpió el sistema Medicaid, que proporciona asistencia sanitaria a millones de estadounidenses con bajos ingresos, y puso a escuelas, hospitales, organizaciones sin fines de lucro, empresas de investigación y organismos encargados de hacer cumplir la ley en apuros para saber si habían perdido el apoyo financiero del gobierno federal.
El martes por la tarde, un juez federal del Distrito de Columbia bloqueó temporalmente -hasta el 3 de febrero- la orden en respuesta a una demanda interpuesta por Democracy Forward, una organización liberal que argumentaba que la directiva violaba la Primera Enmienda y una ley que regula cómo deben aplicarse las órdenes ejecutivas.
Fiscales generales de 23 estados también habían anunciado que impugnarían la orden del ejecutivo.
Agencia AP