El Banco Nación se transformó en otro de los brazos a través de los cuales el Gobierno ejecuta su batalla contra gobernadores e intendentes por los impuestos provinciales y tasas municipales. En este caso, la entidad dirigida por Daniel Tillard anunció el cierre de su sede de Ramos Mejía, en La Matanza. En un comunicado oficial explicaron que se adoptó esta decisión “como consecuencia de la elevada incidencia de la tasa municipal que se ha transformado en un impuesto sobre los créditos a las familias, inclusive los hipotecarios y las empresas”.

Fuentes del Banco Nación describieron que el foco de la cuestión está puesto en las tasas de servicios de La Matanza, y estimaron que entre enero y agosto debieron pagar $3500 millones por estas cargas municipales. Esta cifra, tal cual informaron, equivale a la nómina salarial de los 150 trabajadores que tiene la entidad en todas las sucursales que posee en el territorio gobernado por el intendente Fernando Espinoza. Solamente en la de Ramos Mejía trabajan 60.

El Banco Nación tiene más de una sucursal en La Matanza. De acuerdo a su página oficial, tiene sedes abiertas en González Catán, Gregorio Laferrere y varias en San Justo, entre otras. Por lo tanto, aquí surge el interrogante de por qué la entidad decidió cerrar solamente una. En consecuencia, sus representantes explicaron que se debe a que la de Ramos Mejía es donde “hay más créditos radicados y es factible atenderlos desde otra jurisdicción”.

El intendente de La Matanza, Fernando Espinoza.

En cuanto a los trabajadores de la sede que cerrará, afirmaron que serán reubicados en otras sucursales del banco. Asimismo, los clientes que habitualmente se atendían en la sede de Ramos Mejía podrán asistir a otras sucursales y/o continuar a través de canales digitales.

LA NACION se contactó con los responsables de prensa del municipio de La Matanza, quienes aún no se han expresado sobre la determinación del Banco Nación.

“El Gobierno ha logrado el superávit financiero, consigue desplomar la inflación y los argentinos recuperamos la moneda. Nuestro mandato en el Banco Nación es multiplicar los créditos y lo estamos haciendo. A finales de septiembre los desembolsos de préstamos de 2024 alcanzaron el equivalente a US$11.000 millones con un crecimiento récord en términos nominales y reales. Vamos a suprimir los obstáculos que impiden el crecimiento del crédito: las tasas municipales exorbitantes son uno de ellos”, dijo Daniel Tillard, presidente del Banco, en un comunicado.

Esta es la segunda vez en la semana que el municipio comandado por Espinoza está involucrada en un conflicto. Antes del caso Banco Nación, Marcos Galperin, fundador de Mercado Libre, apuntó contra el municipio por la clausura de la obra de un centro logístico de la empresa en el Mercado Central, que implicó una inversión de US$75 millones.

En redes sociales, Galperin comentó: “El Peronismo, 80 años combatiendo al capital y generando pobreza. En La Matanza sobra el empleo, la seguridad y el bienestar así q combaten las nuevas inversiones y empleos. Tenemos + de 20 centros de distribución en toda América, solo en La Matanza nos los clausuran”.

Fuentes municipales habían explicado que la clausura de la obra de Mercado Pago se debía, presuntamente, a la falta de tramitación de la habilitación correspondiente por parte de la empresa. Además, Espinoza le respondió a Galperin. también por redes sociales, con un tono más político: “No todo se puede desregular, como bien lo sabe usted por su actividad en otros países. Esas disposiciones tienen que ver, entre otras cosas, con la seguridad de los trabajadores, del entorno socio económico y del impacto en el medio ambiente, entre otras cuestiones”.

De vuelta en el caso Banco Nación, la entidad ya tomó varias decisiones similares a las de La Matanza pero finalmente no terminaron con el cierre de sus sedes. La primera de ellas estuvo vinculada a sus sedes en La Pampa por los impuestos provinciales. En aquella oportunidad, el ministro de Economía, Luis Caputo, comentó la decisión del Nación en redes sociales: “Está perfecto!”. Finalmente, narraron representantes del banco, la provincia dio marcha atrásy las sucursales no llegaron a cerrarse.

Un caso similar ocurrió en un municipio de la ciudad de Goya, Misiones, y en General Deheza, en Córdoba, donde intervino la Justicia.