De forma discreta, el jefe gobierno porteño, Jorge Macri, abrió una negociación con la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, para garantizarse que el bloque de La Libertad Avanza que conduce María del Pilar Ramírez, el principal alfil de la hermana del primer mandatario en la Capital, apoyará el proyecto de presupuesto 2025 y la segunda lectura de la reforma del Código Urbanístico, las votaciones más importantes que habrá en la Legislatura porteña antes de fin de año.

Dado que depende de un equilibrio cada vez más inestable para conformar una mayoría de 31 votos que le permita aprobar las iniciativas del oficialismo, el jefe porteño activó tratativas al máximo nivel para conocer de antemano si Ramírez y los cuatro legisladores que responden a Karina Milei están dispuestos a acompañar las iniciativas de Pro en una sesión que está prevista para el jueves 5 de diciembre. Ayer, apenas Néstor Grindetti, jefe de Gabinete porteño, concluyó su informe de gestión, Jorge Macri y Karina Milei encabezaron una cumbre en el despacho de Clara Muzzio para bajar la tensión política entre Pro y LLA en el bastión del macrismo.

Además del primo del exmandatario Mauricio Macri y Karina Milei, concurrieron Grindetti, el vicejefe de Gabinete, Gabriel Sánchez Zinny; el secretario de Desarrollo Urbano, Álvaro García Resta; Matías López, vicepresidente primero de la Legislatura; Ramírez; y Nicolás Pakgojz, titular de la Agencia de Administración de Bienes del Estado (AABE). Pakgojz, actual secretario general de LLA en la ciudad y exfuncionario de Horacio Rodríguez Larreta, es un hombre de confianza de Karina Milei y Ramírez. Más allá de que tiene un perfil técnico y asiste a la hermana del Presidente en los asuntos de la ciudad, Pakgojz venía conversando con la Ciudad para evaluar el desarrollo de tres terrenos de la Nación que están en la Capital. En Pro admiten charlas para lograr una compensación por la deuda vinculada a los fondos de coparticipación. Ayer, dicen fuentes al tanto de la negociación, no se tocó el tema. El foco de la discusión estuvo puesto en el Presupuesto y los cambios en el Código Urbanístico.

Patricia Bullrich y Jorge Macri

Si bien el encuentro fue “cordial”, no lograron cerrar un acuerdo. Los libertarios, que habían rechazado el código urbanístico en la primera lectura, reclamaron que se constituya una mesa de trabajo para evaluar el texto. “Nos vamos a sentar a charlar, pero no vamos a renunciar a la línea que marca el Presidente”, anticipan desde la bancada de LLA.

Los libertarios, que se convirtieron en un gran escollo para el Pro en la Legislatura, un tema que inquieta y molesta a Mauricio Macri por el aporte a la gobernabilidad de Milei que hace su fuerza en el Congreso desde el 10 de diciembre, buscan forzar cambios antes de comprometerse a apoyar. Insisten en que presentaron numerosas observaciones al oficialismo respecto del presupuesto, vinculadas a impuestos patrimoniales, ABL o patentes. “Se aleja mucho de nuestra agenda y valores. Lo estamos estudiando”, avisan. Eso sí: en la sesión convocada para este jueves podrían aprobar la creación de un régimen de empleo para la enfermería del sistema público de salud, que impulsa Pro. Argumentan que se disponen a respaldar esa reforma porque el Ejecutivo incorporó modificaciones en el articulado sugeridas por LLA.

Allegados a Karina Milei comentan que decidió intervenir para ordenar la tropa en la Legislatura y evitar nuevos contratiempos con Jorge Macri. Hizo un gesto, aseguran, para buscar una mayor coordinación y evitar ruidos en la convivencia con los principales aliados de Milei. “Fue una charlar para ordenar. Las posiciones de Pro y LLA en el Congreso no se reflejan en la Legislatura. Por eso, la intención fue bajar la espuma y encontrar puntos de diálogo”, grafican cerca de Jorge Macri.

Pilar Ramírez y Karina Milei

Hasta ahora, el jefe porteño no logró coordinar la agenda parlamentaria ni conciliar posiciones con Ramírez, quien se desmarcó del oficialismo en las últimas votaciones clave para Jorge Macri y se puso al frente de la presentación de la ley bases para la Ciudad -una jugada política avalada por la hermana del Presidente que irritó al macrismo- para para reestructurar el Estado, eliminar el 50% de los cargos políticos y reducir la planta de empleo público en la administración capitalina. Y el viernes, en espejo con la reforma política que impulsa Milei en el Congreso, presentó una iniciativa para eliminar las PASO en la Capital. La maniobra contó el respaldo de Juan Pablo Arenaza María Luisa González Estevarena y Silvia Imas, legisladores de Pro que comanda Patricia Bullrich.

En paralelo, los karinistas presionan a Pro que empuje el tratamiento de la adhesión de la Ciudad al Régimen de Incentivo para Grandes Inversiones (RIGI) y al blanqueo de capitales que fueron aprobados en el Congreso Nacional. “A la Ciudad le sirve y los quiere, pero no están los votos”, aducen en Pro. También piden a Jorge Macri que intervenga en la disputa entre Ramírez y Ramiro Marra por el uso del nombre de LLA en la Legislatura. A diferencia de Ramírez, el bloque de Marra, uno de los desterrados por Karina Milei, vota en sintonía con los intereses de Pro, para preservar la sociedad que le permite al Presidente sacar leyes en el Congreso.

Diferenciación

Entre tanto, Jorge Macri intenta recuperar la iniciativa política y encarrilar su gestión en la Ciudad. Mientras Milei goza de un pico de popularidad, el jefe porteño hace equilibrios a la hora de diferenciarse del Gobierno. En los debates internos, promueve la idea de que Pro requiere preservar su identidad y vocación de poder para sus votantes no terminen de ser absorbidos por LLA y garantizar el blindaje político de la ciudad. Cree que el Pro necesita mantenerse como una alternativa a Milei y consolidarse como la derecha moderada y republicana. Por caso, en las últimas horas tomó distancia de la Casa Rosada en dos temas institucionales. A diferencia del Presidente, que pegó el faltazo, asistió a la 30° conferencia de la Unión Industrial Argentina (UIA), donde llamó “patriotas” a los empresarios del sector por dar empleo, pero destacó los logros del gobierno de Milei en el ordenamiento de la macroeconomía y la implementación del plan de ajuste para bajar la inflación. A su vez, Jorge Macri se plegó a la jugada de los gobernadores de JxC para redoblar la presión sobre la Casa Rosada para que incluya el proyecto de Presupuesto en el temario de las eventuales sesiones ordinarias. Este miércoles, durante la presentación del plan de la Ciudad para las líneas de colectivos que fueron transferidas por la Nación, remarcó que el Gobierno debería reunir los consensos para conseguir la aprobación del presupuesto para evitar un clima de incertidumbre en los mercados. “El mundo va a mirar y va a decir: ‘Esperá, ¿cómo es esto?’. Todas estas buenas noticias quedan medio en el aire en función de no tener un Presupuesto”, planteó.

Cerca de Jorge Macri apuntan que, en caso de que Milei no tenga esa herramienta, no podrá generar previsibilidad entre los inversores. “La duda en el exterior es si el proyecto de Milei va a ser duradero y consistente, o si puede volver a ocurrir lo que nos pasó en la gestión de Cambiemos”, plantean en la cúpula de la Ciudad. En la Casa Rosada minimizan esas lecturas o los pedidos que le hizo Mauricio Macri a Milei para fortalecer la institucionalidad. Consideran que la decisión de Milei de preservar a como dé lugar el déficit cero es el pilar de su plan económico.

El gran foco de tensión entre Pro y LLA está ligado al armado electoral de 2025 en la Capital. Por ahora, admiten en ambos campamentos, las tratativas para explorar un acuerdo están estancadas. “No vamos a renunciar a nuestro espacio ni a nuestros candidatos. Queremos llenar el Congreso de leales”, repiten cerca de Karina Milei. En el entorno de Jorge Macri no descartan desdoblar los comicios, pero anticipan que hasta marzo no habrá definiciones sobre la estrategia porteña de Pro.

Jorge Macri