Tras más de cuatro días de búsqueda, este sábado los efectivos de la policía de Brasil hallaron el cuerpo de Federico Bruni, el argentino que había desaparecido en la zona de São Bonifácio, cerca de Florianópolis. El joven de 32 años se encontraba hospedado en el camping Pandang dentro de la misma localidad, pero había ido a acampar en soledad el martes pasado cerca del río Do Ponche, en donde finalmente fue encontrado su cuerpo.
Oriundo de Munro, Bruni era un apasionado de los viajes, tal como se definía en sus redes sociales. Además, le gustaba la música y tocaba la armónica y la guitarra. Este no había sido el primer viaje a Brasil, ya que había ido en numerosas ocasiones anteriores a ciudades como Río de Janeiro, San Pablo y Bahía.
En 2013 se recibió de periodista deportivo en Tea&Deportea -institución que publicó un mensaje de despedida cuando se conoció la noticia del fallecimiento- y también escribía poemas y relatos cortos que compartía en una cuenta de Instagram, @lunayascendente.
El joven también formaba parte de las incorporaciones de 2024 del plantel mayor del equipo de futsal de la Sociedad de Fomento Drysdale de Vicente López, en donde residía actualmente. Según sus allegados, sentía un profundo amor por su familia, sus amigos y su país y uno de sus tatuajes estaba justamente dedicado a este último: el escudo argentino, que llevaba en el brazo.
Bruni estaba en Brasil desde el 16 de diciembre pasado y mantenía un contacto frecuente con su familia. Como había advertido que pasaría unos días sin señal, tanto su hermana como sus padres no se habían alarmado hasta que vieron la publicación en la que se pedía información sobre él.
El miércoles pasado la policía local encontró la camioneta de Bruni a orillas del río Do Ponche, en las cercanías de donde había montado el acampe. Dentro del vehículo estaban sus documentos y su celular y, al lado de la camioneta, había una carpa armada, una reposera y su perro, Bujía. Sin embargo, no encontraban al argentino. El viernes llegaron varios amigos a la zona de Brasil en donde fueron encontradas sus pertenencias para sumarse a la búsqueda junto con sus padres y otros familiares.
En paralelo a la búsqueda oficial, iniciaron una campaña en redes sociales para difundir su desaparición y solicitar información. A través de publicaciones en Instagram pedían a cualquier persona que haya estado en la zona en los últimos días que se comunique con ellos o con las autoridades brasileñas. “Cualquier cosa por favor, nos ayuda”, remarcaron.
Finalmente, este sábado los efectivos dieron con el cuerpo del joven. Según los bomberos, el cadáver estaba a la orilla del río Do Ponche, en una zona con mucha vegetación. El cuerpo fue trasladado por la policía científica brasileña, que está a cargo de investigar qué sucedió.
Poco después, la cuenta dedicada a la búsqueda publicó una foto en la que confirmaba el fallecimiento de Federico. “La búsqueda terminó. No es el desenlace que esperábamos. Frenen la viralización y por favor dejen de contactar a Dani. Muchas gracias a todos por su ayuda”, decía el mensaje.
La zona de São Bonifácio en donde había desaparecido es una región de densa vegetación y difícil acceso que se caracteriza por tener ríos caudalosos y senderos de trekking. Esta parte de la región, cercana al parque nacional Serra Do Tabuleiro, es conocida por sus áreas naturales y su selva tropical, donde las lluvias frecuentes pueden dificultar la visibilidad. El río Do Ponche, donde se encontró la camioneta del argentino, tiene fuertes corrientes que atraviesan zonas de difícil acceso y cuenta con distintas cascadas.