Sin duda es uno de los galanes más atractivos de nuestra televisión, y él lo sabe. Y lo aprovecha. A lo largo de sus 49 años, Luciano Castro tuvo varias parejas, dos convivencias, un matrimonio, tres hijos, romances secretos y hasta amantes. Desde hace siete meses está en pareja con Griselda Siciliani, con quien tuvo un fugaz romance hace 17 años, cuando ella daba sus primeros pasos en Patito feo, la novela juvenil de Canal 13 y él ya era protagonista en Lalola, una novela que se vio en América en 2007.
Entonces nada se supo de esa relación que mantuvieron en cuidadoso secreto y recién muchos años más tarde, Susana Giménez lo reveló con una pregunta indiscreta a Siciliani. “Usted tuvo un novio famoso, leí alguna vez. LC, se llamaba”, le había dicho la diva en un sketch con Antonio Gasalla en el que Griselda participó. “Fue un romance. Tampoco éramos novios”, salió del paso la actriz. Después contó que se trataba de Luciano Castro y detalló que fue “antes de Adrián (Suar). Éramos muy jóvenes. No quiero hablar porque a él no le gusta. Es ermitaño el gordo y lo quiero mucho. Fue una cosita”, minimizó.
Lo cierto es que Griselda y Luciano siempre tuvieron buena onda y hasta se sospecha que fueron amantes durante mucho tiempo. A principios de abril de este año se reencontraron en el cumpleaños de una amiga en común, Carla Peterson, y el fuego volvió a encenderse. Primero intentaron esquivar los rumores y el actor declaró: “No me enoja que me inventen un romance con Griselda. Lo tomo como lo que es, una pavada más. Sobre todo si es Griselda, porque si me inventan con una persona que no conozco, por ahí sí me enojo, pero bueno, lo mío con ella data ya de años. Hace poco nos cruzamos en un lugar y hablamos y nos reíamos de la facilidad con que se instala un rumor”.
Los programas de chimentos insistieron y la buscaron a ella: “Todo ok con Luciano, estamos saliendo y está todo bien”, aseguró. Después, ya más relajado, el actor contó en Noche al Dente, el programa de América: “Ya sé que Griselda habló. Con ella es todo muy… No sé cómo explicar mi relación con Gri (risas). No es que conocí a una chica y estoy empezando a vincularme o relacionarme. Nos reencontramos en el cumpleaños de la Peterson y después nos pintó ir a cenar. Pero no puedo decorar eso, porque son años de una amistad, de conocernos mucho. Estuvimos un tiempo sin hablarnos y sin vernos, pero tenemos amigos en común. Y los amigos en común llevan y traen (risas). Hay amigos que sin querer te cuentan. Cuando nos vimos no tuvimos la misma charla que a los veintipico. Ese reencuentro se transformó en algo muy lindo. A mí me gusta mucho la Tana. Siempre me gustó. Me parece increíble lo que nos pasa. La vida te pega cada viaje que no la podés creer. Lo más lindo para mí sigue siendo lo que no te esperás. Yo no planeé encontrarme con Griselda y ella tampoco conmigo, y eso lo hace muy atractivo. Muchas veces es mejor contarlo a que piensen que es algo prohibido, porque no lo es. Los dos estamos solos y vivir como prohibido algo que puede ser una linda historia es una mierda. Me escondí varias veces y es re triste, por eso no quería darle ese lugar a esta relación. Siento que ninguno se lo merece. No es una chica más”, se sinceró. Ellos viven su idilio sin importarles el qué dirán. Y se dicen muchas cosas.
Sabrina Rojas, su única esposa
Luciano Castro se casó solamente una vez y fue con Sabrina Rojas, con quien estuvo durante doce años y tuvo dos hijos, Esperanza, que hoy tiene 11 años y Fausto, de 9. Se casaron en diciembre de 2016 y, con libreta en mano, ella comentó: “Me casé con el amor de mi vida”. Se separaron en 2021 y al principio todo era amor y flores hasta que sacaron los trapitos al sol.
Coincidieron en el elenco de Valientes, la versión teatral de la novela que protagonizaron Luciano Castro, Gonzalo Heredia y Mariano Martínez, y se pasaron el verano entero coqueteando en Mar del Plata, en camarines y en la playa, donde el elenco compartía una carpa en un balneario cerca del faro. Al principio fueron amantes porque ella estaba en pareja, hasta que decidieron blanquear. Tiempo después los dos hablaron de ese momento: “No tenía una buena imagen de él, porque pensaba que le gustaba mucho andar de fiesta. Él también creía que yo era una femme fatale, pero cuando nos conocimos, nos descubrimos, nos enamoramos y todo fue rápido y consistente”, dijo Sabrina. Por su parte, Luciano reconocía: “Sabrina es todo para mí. Tengo una gran admiración. Dejó todo por mí, tenía una carrera ascendente, podría haber seguido con lo suyo y aceptó mi propuesta de formar una familia. Es una mujer con mayúsculas”. Parecían una pareja perfecta y en una oportunidad ella posteó fotos acompañadas por la frase: “La temporada de teatro que nunca olvidaré”.
En 2018 tuvieron una fuerte crisis y él se fue de la casa, pero poco tiempo después hubo reconciliación porque priorizaron a la familia y se dieron otra oportunidad. Sin embargo, no funcionó. “Somos una pareja totalmente común, no somos Marcelo Tinelli ni tenemos estrategias de prensa, hacemos lo que podemos. Hay un desgaste de la vida, no hay una fecha. La rutina trae un desgaste tremendo, pero no pasó nada. Hubo hastío”, había dicho Sabrina en ese momento. Todo se mantuvo tranquilo hasta que en 2019 viralizaron unas fotos íntimas que el actor le había enviado a otra mujer durante la breve separación. Fue un escándalo. “Estuvimos separados casi tres meses, y cada uno hizo lo que quiso. Evidentemente, yo me moví con gente más confiable, pero también me entretuve. Cada uno lo vivió como quiso. Es un bajón esto, pero salimos adelante”, minimizó ella. Él se enojó más pero el asunto pasó y ellos siguieron juntos.
Rompieron en 2021. “Nos separamos hace un tiempito ya. Pero bien los dos. Nos van a ver mil veces juntos porque nos separamos como pareja, no como familia”, contó ella en LAM.
La novia que lo desestructuró y algunos romances secretos
Al poco tiempo de su separación, Luciano Castro se mostró con Flor Vigna y fue su etapa más mediática. No le importó mostrarse con ella en cualquier lado, hasta en sus videos. Se conocieron en un gimnasio, entrenando, y a pesar de la diferencia de edad, veinte años, apostaron al vínculo. Hicieron teatro juntos, compartieron giras y también convivieron un tiempo hasta que se separaron a principios de este año.
El actor tuvo varios romances secretos. Julieta Díaz fue uno de ellos, mientras protagonizaban Valientes, en el 2009. Nunca se mostraron juntos ni confirmaron ni desmintieron nada.
Castro también tuvo un amorío con Pata Villanueva, cuando apenas tenía 18 años y abandonaba el sueño de ser futbolista profesional como su papá, que fue arquero en Chacarita Juniors. Jamás se supo nada hasta que ella, hace algunos años, lo contó en televisión: “fue hace mucho tiempo atrás, él era jugador de fútbol y alguien me lo trajo a mi oficina porque quería ser modelo. Pero yo necesitaba una secretaria y le dije que, si quería, lo tomaba. Luciano estaba bárbaro, era re joven. Como secretario era un desastre, pero era tan lindo que no lo echaba”, contó Pata.
La relación del actor con Elizabeth Vernacci fue muy mediática, porque entonces llamó mucho la atención la diferencia de edad: ella le lleva 14 años. Fue en 2005 y estuvieron cuatro años juntos, con algunas idas y vueltas. “¡Cómo no lo voy a querer si me hizo muy feliz!”, dice ella cada vez que le preguntan por él.
Florencia fue el primer amor de Luciano, cuando todavía estaba dando sus primeros pases en el mundo del espectáculo. Se conocieron en el 2000, en una fiesta, y en el 2002 nació Mateo.