La icónica tienda Sears, ubicada en el centro comercial Westfield Southcenter, en Seattle, cerró definitivamente sus puertas el 15 de noviembre. Según lo confirmado por voceros de la empresa, este histórico local marcó el final de una era para los consumidores en el estado de Washington.
Con el objetivo de liquidar el inventario restante, los responsables del negocio lanzaron una agresiva campaña de descuentos que alcanzó rebajas de hasta el 70% en diversos productos, informó The Sun. Carteles en la tienda advertían: “Todo debe desaparecer”, una señal inequívoca de que el cierre ya era inminente y de que los compradores tenían la última oportunidad para aprovechar las ofertas.
Una tienda con historia que bajó su persiana
Desde su apertura en 1994, la tienda Sears en Westfield Southcenter se convirtió en un punto de referencia para los habitantes de la región. Ahora, este local representó la despedida de la última tienda Sears en funcionamiento en todo el estado de Washington. Además, este suceso simboliza un cambio profundo en el mundo del comercio minorista estadounidense.
La cadena, que alguna vez fue el gigante del sector, contaba con más de 3500 tiendas Sears y Kmart combinadas hace menos de dos décadas. Sin embargo, la compañía comenzó a enfrentar serios problemas financieros, lo que llevó a declararse en quiebra en 2018. Desde entonces, el número de tiendas cayó de forma drástica y se redujo a solo 22, en agosto de 2023. Actualmente, quedan apenas nueve sucursales en todo el país.
Descuentos y cierres en cadena de Sears
El cierre de la tienda de Seattle sigue el mismo patrón que se observó en otros establecimientos de la misma cadena. En verano, por ejemplo, Sears cerró su sucursal en Stockton, California, donde se ofrecieron descuentos de hasta el 75% en algunos productos.
En esa oportunidad, los precios de ropa se redujeron hasta en un 50%, mientras que los equipos de gimnasia llegaron a tener un 40% de descuento, según reportó el medio local Stockton Record. Este modelo de liquidación se repitió a lo largo de los últimos cierres, con el objetivo de agotar los inventarios restantes antes de las fechas de cierre.
El impacto de los problemas financieros no se limita solo a Sears. Otras cadenas minoristas, como Big Lots y Family Dollar, también enfrentaron dificultades económicas que llevaron al cierre de múltiples locales en todo el país. Recientemente, se anunció el cierre de 19 tiendas Big Lots, mientras que una tienda Kohl’s en Virginia también dejará de funcionar en 2025.
El cierre de su última tienda en el estado de Washington es un recordatorio de cómo las dinámicas económicas pueden cambiar, incluso, para los nombres más establecidos. Sin dudas, este acontecimiento marca el fin de un capítulo importante en la historia del comercio estadounidense.