El gobierno de Luis Lacalle Pou ha sido uno de los más críticos del régimen venezolano. El mandatario fue uno de los primeros jefes de Estado en cuestionar los resultados del 28 de julio en la red social X. “Así, no”, escribió. Luego su administración reconoció a Edmundo González Urrutia como presidente electo y recibió al líder de la oposición en Montevideo antes del 10 de enero, la fecha en la que le correspondía asumir la Presidencia.
Pero el gobierno de Lacalle Pou está de salida. El 1° de marzo el actual jefe de Estado le pasará la banda presidencial a Yamandú Orsi y pretende que, pese al cambio de signo político, la administración del Frente Amplio siga con la misma línea. Pero lo que hará el gobierno electo todavía es una incógnita, aunque el presidente electo sí lo ha definido al régimen como una dictadura.
El canciller Omar Paganini criticó este lunes que el Frente Amplio no se haya expresado de forma contundente sobre las elecciones del 28 de julio
“Me parece importante que el Uruguay siga en esta posición de condena al régimen. Lo que no quiere decir que no se busque o se impulse una salida negociada, que sería lo mejor. Pero tenemos que ser firmes en la condena y vemos que el gobierno electo no ha generado por ahora demasiada información respecto a cómo se planta en esta situación”, declaró el canciller, al ser entrevistado en el programa Desayunos Informales de Canal 12.
Paganini consideró que fue una señal importante que Colombia y Brasil –dos países que han sido cercanos al régimen– no hayan legitimado la jura de Maduro del viernes 10.
Este lunes, Alejando Sánchez, uno de los dirigentes más cercanos a Orsi, se refirió a la posición del gobierno entrante. El futuro secretario de la Presidencia (un cargo similar al de jefe de gabinete) aseguró que Orsi ha sido “claro” en cuanto a su posicionamiento.
“En Venezuela ha habido un proceso de deterioro de las condiciones democráticas que han llevado a situaciones en donde, por ejemplo, en la última elección quedó una sensación de que quedó cuestionada. Eso es así: es una realidad política con la que convivimos. Es un problema que tiene América Latina”, señaló el ex jefe de la campaña de Orsi.
Sánchez adelantó que el gobierno entrante buscará “los caminos de diálogo”, con la intención de que Uruguay sea una “plataforma” para esas conversaciones.
El secretario de la Presidencia designado dijo que el futuro canciller, Mario Lubetkin, “está monitoreando” este asunto. “La política exterior será contribuir a la paz, a la democracia y a la libertad”, señaló.
El canciller uruguayo actual recibió a González Urrutia el sábado 4 en Montevideo junto al presidente Lacalle Pou y luego participó en el encuentro de ex presidentes y cancilleres en Panamá. Los países que reconocen a González como presidente electo tenían la expectativa de que hubiera un quiebre en el apoyo de las Fuerzas Armadas a Nicolás Maduro, dijo Paganini, aunque esto finalmente no se concretó.
Paganini ahora espera que haya una baja de la presión internacional contra el régimen. “La movilización del jueves 9 fue muy grande en Venezuela, pero después de un momento de movilización la gente tiene que seguir su vida. Y ese es el problema que ha tenido la oposición que busca este camino de presión interna y externa al régimen, pero no ha logrado ninguna fisura en las Fuerzas Armadas que son el último apoyo del gobierno”, señaló.
Orsi no estuvo en el encuentro con González Urrutia, pero no porque se haya negado, aclaró Sánchez. El futuro jerarca consideró que está “muy bien” que el gobierno de Lacalle Pou no haya roto relaciones diplomáticas con Venezuela.