Un hombre de Hawái llamado Kenji Nonaka fue mordido por un tiburón el pasado 1° de noviembre mientras surfeaba en Waiehu Beach Park. El surfista de 61 años pudo sobrevivir, pero perdió parte de la pierna derecha hasta la rodilla, pero lejos de ser pesimista y alejarse de su actividad favorita, Nonaka piensa en volver al agua a principios de diciembre.
“Estaba sentado en mi tabla de surf, esperando una ola y de repente, un tiburón me muerde y me sacude”, le dijo Nonaka a Hawai News Now. Además, añadió que 20 o 30 segundos después del ataque, su pierna desapareció y comenzó a gritar para pedir ayuda. A pesar del mal momento que pasó, el surfista considera que tuvo suerte.
El surfista de 61 años tuvo suerte de haber estado acompañado por sus amigos cuando fue atacado por este animal. Gary Miyamoto, que se encontraba cerca de Nonaka cuando ocurrió este episodio, reaccionó con velocidad cuando su amigo grito al pedido de ayuda y le realizó un torniquete con la correa de la tabla de surf alrededor de la pierna para detener la hemorragia. Esta acción salvó la vida del hombre.
No era la primera vez que un tiburón mordía a Nonaka, ya que unos meses atrás, en esa misma zona donde perdió la mitad de la pierna, fue atacado por otro, aunque tuvo suerte de no haber sufrido heridas mayores. Esta situación dejo nervioso al surfista y desde ese episodio comenzó a utilizar una pulsera “antitiburones”, que funcionaba con energía magnética para ahuyentar a estos animales.
“Entonces lo vi, ya sabes, chapoteando. De repente vi que el agua se volvía roja”, recordó Myamoto. A lo que Nonaka respondió: “Por eso sigo vivo. Tuve suerte. Estoy muy agradecido porque mis amigos me ayudaron”.
El hombre, que perdió la mayor parte de su pierna desde la rodilla hacia abajo por el ataque del tiburón, recaudó más de US$100 mil para su proceso de recuperación gracias a una recaudación por medio del sitio web GoFundMe. El pasado 7 de septiembre, en una actualización de la campaña, Nonaka informó que fue dado de alta del hospital y que se encontraba “supermotivado” para comenzar su proceso de rehabilitación y así volver al océano lo antes posible.
Además, el surfista le comentó a KHON que su médico le dijo que podía conservar su rodilla debido a que sus amigos lograron mantener su pierna limpia durante el accidente. “Vinieron a mí y me dieron poder y aloha. Estoy feliz y por eso sigo vivo”, comentó Nonaka. También añadió que, aparte del cuidado de sus amigos, tuvo la “protección” de su héroe, Tamayo Perry, un hombre que murió en junio de este año en la costa norte de Hawái.
Cuando el medio le consultó cuándo planeaba volver a surfear, Nonaka les respondió: “mañana”, en tono de broma y luego agregó que esperaba que fuesen un par de meses más de recuperación antes de volver al océano. “Me encanta surfear, quiero volver a surfear, para el tiburón es su propiedad [el océano], por eso tenemos que compartir”, sostuvo.
Nonaka ya se pudo volver a poner de pie mediante el uso de un andador a un poco más de dos semanas de haber sufrido el ataque del tiburón. Por ahora, el hombre espera la próxima oportunidad para subir a una tabla de surf y buscar olas.