El primer ministro del Reino Unido, Keir Starmer, expresó su inquietud por la situación de Jimmy Lai, editor y activista prodemocracia de Hong Kong que permanece detenido desde diciembre de 2020 bajo cargos de una controvertida ley de seguridad nacional impuesta por Beijing. Lai, de 76 años y ciudadano británico, podría enfrentar hasta cadena perpetua si es condenado.
“Estamos preocupados por los informes sobre el deterioro de la salud de Jimmy Lai en prisión”, declaró Starmer el lunes al reunirse con el presidente chino Xi Jinping en la cumbre del G20 en Brasil. Destacó que su Secretario de Relaciones Exteriores se reunió con el Ministro de Relaciones Exteriores de China, Wang Yi, para abordar “preocupaciones respectivas, incluidas los derechos humanos, las sanciones parlamentarias, Taiwán, el Mar de China Meridional y nuestro interés compartido en Hong Kong”.
Los periodistas fueron retirados de la sala al inicio de la reunión bilateral del lunes cerca del momento en que Starmer planteó el caso de Lai, reportó la agencia Press Association de Reino Unido.
Lai, fundador del ahora clausurado periódico Apple Daily, es una de las figuras más destacadas en la lucha por la democracia en Hong Kong. Su detención bajo la ley de seguridad nacional -criticada internacionalmente por su alcance y vaguedad- ha suscitado preocupación entre defensores de derechos humanos y gobiernos occidentales, quienes denuncian una intensificación de la represión en la región.
En el mismo contexto, Starmer mencionó que su gobierno ha “tomado medidas” respecto a la construcción de un edificio de la embajada china en Londres, indicando que la solicitud fue retirada y que ahora se procederá de acuerdo con el marco legal vigente.
Fue la primera vez que un mandatario británico se reúne con Xi en los últimos años, ya que las relaciones entre ambos países se deterioraron por preocupaciones de seguridad y derechos humanos y el apoyo de China a Rusia en la guerra en Ucrania.
Starmer, quien se convirtió en primer ministro en julio después que su Partido Laborista se llevara una victoria electoral aplastante, busca reparar las relaciones con Beijing. La última vez que un mandatario del Reino Unido se reunió con Xi fue en 2018.
“Queremos que nuestras relaciones sean consistentes, duraderas y respetuosas, como hemos acordado (y) evitar sorpresas cuando sea posible”, dijo Starmer a Xi durante una reunión al margen de la cumbre del G20 en Río de Janeiro.
Downing Street informó que Starmer pretendía un enfoque “pragmático” para trabajar con Beijing en la estabilidad mundial, impulsar los lazos económicos y especialmente respecto al cambio climático y la transición a la energía limpia.
Starmer “quería comprometerse de manera honesta y franca en aquellas áreas donde tenemos perspectivas diferentes, incluyendo sobre Hong Kong, derechos humanos y la guerra de Rusia en Ucrania”, detalló su oficina en un comunicado después de la reunión.
Xi le dijo a Starmer que el Reino Unido y China tienen potencial para más cooperación a pesar de sus diferencias y deberían profundizar la confianza política para beneficio mutuo, según la agencia estatal de noticias de China, Xinhua.
La reunión del lunes se produjo luego que el secretario de Relaciones Exteriores del Reino Unido, David Lammy, visitara Beijing el mes pasado para conversaciones con su homólogo, Wang Yi.
(Con información de AP)