Nueva York está viviendo uno de los inviernos más intensos de los últimos años, con una ola de frío ártico que no da tregua y nevadas que han paralizado varios puntos de la región. En las últimas horas, las nevadas dejaron un paisaje blanco en la Gran Manzana, con acumulaciones considerables en distintos condados del estado. Buffalo, al oeste de Nueva York, reportó hasta 6 pulgadas (15 centímetros) de nieve, mientras que zonas como Orchard Park y West Seneca acumularon entre 14 y 16 pulgadas (35 a 40 centímetros).
- El Servicio Meteorológico Nacional (NWS, por sus siglas en inglés) también advirtió sobre posibles nevadas adicionales en las próximas horas debido al efecto lago.
- Las calles quedaron cubiertas de una capa helada, lo que generó condiciones peligrosas tanto para peatones como para conductores. Las autoridades reforzaron los operativos de limpieza y han instado a la población a evitar desplazamientos innecesarios.
Qué se espera de la ola de frío en Nueva York para las próximas horas
La llegada de una masa de aire ártico desde el lunes por la noche fue el factor determinante de esta ola de frío. Durante el día, las temperaturas oscilaron entre los -6 y los -9 grados Celsius, con sensaciones térmicas que alcanzan los -15 °C en zonas al oeste de la ciudad.
El NWS mantiene una alerta de frío extremo hasta el miércoles inclusive, especialmente para las áreas cercanas al río Hudson y Long Island. Aunque se espera que el sol haga acto de presencia durante el día, los vientos de hasta 18 kilómetros por hora intensificarán la sensación de frío.
Advertencias para la población
Ante esta situación, las autoridades emitieron una serie de recomendaciones para garantizar la seguridad de los residentes y visitantes:
- Evitar salir de casa: las carreteras heladas representan un alto riesgo de accidentes.
- Preparar un kit de emergencia que contenga agua, alimentos no perecederos, linternas, baterías y ropa de abrigo.
- Proteger las tuberías para evitar congelamientos.
- Evitar fuentes de calor peligrosas
- Cuidar a las personas vulnerables, especialmente niños, personas mayores o con discapacidades
Este evento extremo se debe a una perturbación del vórtice polar, una corriente de aire frío que normalmente permanece en el ártico, pero que, en esta ocasión, se desplazó hacia el sur. Este fenómeno provocó temperaturas anormalmente bajas en gran parte del país, afectando a 43 estados y dejando a unos 265 millones de personas bajo advertencias climatológicas.
Para este miércoles, se espera que las condiciones climáticas se mantengan extremas. Aunque la probabilidad de nuevas precipitaciones es baja, el frío persistirá con temperaturas mínimas de -9 °C y vientos que podrían alcanzar los 18 km/h durante el día. La nubosidad aumentará por la noche, pero no se esperan cambios significativos en la sensación térmica.
Nueva York, una ciudad acostumbrada a los inviernos duros, enfrenta un desafío que pone a prueba la resistencia de sus habitantes. Mientras tanto, las autoridades continúan monitoreando el clima y emitiendo actualizaciones para garantizar la seguridad de todos.