BRASILIA.- El presidente de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva, sufrió un accidente doméstico en el Palacio de Alvorada el sábado por la noche, que lo obligó a cancelar su participación presencial en la Cumbre de los Brics en Rusia.

Según los informes, Lula estaba sentado en un banco que resbaló, lo que provocó su caída y un golpe en la parte posterior de la cabeza. Como resultado, recibió cinco puntos de sutura. Los médicos le recomendaron evitar viajes aéreos de larga distancia, aunque podrá realizar el resto de sus actividades de manera normal.

Participará en la cumbre de los Brics por videoconferencia en lugar de asistir presencialmente.

El presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva en la sede de la ONU en Nueva York el 25 de septiembre del 2024. (AP foto/Frank Franklin II)

El accidente ocurrió en un momento en el que Lula y la primera dama, Janja da Silva, ya estaban preparando las valijas para embarcar rumbo a Rusia.

Tras la caída, el presidente fue trasladado al Hospital Sirio Libanés en Brasilia, donde fue atendido de emergencia. Los médicos le realizaron varios exámenes para descartar complicaciones, incluyendo una resonancia magnética que reveló un pequeño sangrado, síntoma de una leve conmoción cerebral.

Por precaución, los médicos recomendaron que Lula evite realizar viajes aéreos de larga distancia y permanezca en observación durante las primeras 72 horas, aunque se ha informado que está en buen estado y continuará con sus actividades desde el Palacio de Planalto.

Cumbre de los Brics y la importancia para Brasil

La Cumbre de los Brics, que este año se celebra en Kazán, Rusia, es un evento de gran relevancia tanto para Brasil como para los países miembros del bloque.

Originalmente conformado por Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica, el grupo Brics ha servido como un foro estratégico para abordar intereses comunes de las economías emergentes.

ARCHIVO – El presidente ruso Vladímir Putin habla en el Foro Parlamentario del BRICS en San. Petersburgo, Rusia, el 11 de julio de 2024. (Valery Sharifulin, Sputnik, Kremlin Pool Foto vía AP, Archivo)

En esta cumbre, que se llevará a cabo del 22 al 24 de octubre, se espera la participación de líderes de más de 30 países, lo que refleja la creciente influencia del bloque en la política y la economía global.

Brasil tenía un papel crucial en esta cumbre, no solo por ser uno de los miembros fundadores, sino porque asumirá la presidencia del bloque en enero de 2025.

Lula había planeado aprovechar la ocasión para impulsar su agenda de política exterior, que incluye dos puntos prioritarios: la reforma de la gobernanza global, con especial énfasis en el Consejo de Seguridad de la ONU, y la creación de mecanismos que permitan a los países del Brics depender menos del dólar estadounidense en las transacciones comerciales, promoviendo una mayor independencia financiera del Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial.

De izquierda a derecha, el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, el presidente de China, Xi Jinping, el presidente de Sudáfrica, Cyril Ramaphosa, el primer ministro de la India, Narendra Modi, y el ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Sergei Lavrov, posan para una foto de grupo de los BRICS durante la Cumbre de los BRICS de 2023 en Johannesburgo, Sudáfrica, el 23 de agosto de 2023.

Aunque la ausencia de Lula en Kazán es un contratiempo inesperado, el presidente participará en las sesiones mediante videoconferencia. Además, su equipo, encabezado por el canciller Mauro Vieira, liderará la delegación brasileña en las reuniones presenciales.

Por su parte, la cumbre marca también un hito en la expansión del Brics que recientemente ha sumado a países como Egipto, Irán, Etiopía y Emiratos Árabes Unidos, lo que ha generado controversias por la inclusión de naciones con regímenes autoritarios.

Desafío

Brasil se enfrenta al desafío de mantener un equilibrio entre su tradicional postura de política exterior, que favorece la solución pacífica de controversias y un mundo multipolar, y las tensiones que esta ampliación del Brics puede generar.

Aunque la expansión del bloque podría fortalecer su influencia, algunos analistas advierten que Brasil corre el riesgo de verse relegado a un papel secundario frente a potencias como China y Rusia, que tienen una mayor capacidad de liderazgo dentro del grupo.

Banderas de países con cielo , Brics es el acrónimo de cinco economías emergentes líderes: Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica.

Pero la participación de Lula por videoconferencia permitirá que Brasil continúe presente en las discusiones sobre temas críticos, como la sostenibilidad y la infraestructura, áreas en las que el Nuevo Banco de Desarrollo (NDB), también conocido como el Banco de los Brics, ha jugado un papel crucial. Hasta la fecha, el NDB ha invertido más de 32 mil millones de dólares en proyectos de infraestructura, de los cuales el 18% han sido destinados a Brasil.

La ausencia de Lula en la foto junto a líderes como Vladimir Putin y el nuevo presidente de Irán, Masoud Pezeshkian, puede ser interpretada también como un alivio para evitar posibles tensiones diplomáticas debido a la cercanía con gobiernos autoritarios.

Sin embargo, esta cumbre marca un punto de inflexión para el Brics, que continúa ampliándose en un escenario mundial cada vez más polarizado entre las democracias occidentales y los regímenes autoritarios.

Agencia AFP y diario O Globo (GDA)