En el drama de la inundación en Bahía Blanca se hacen visibles historias como la de Adrián Coccia, un veterinario de 37 años que el viernes 7 de marzo, cuando la ciudad sufrió la peor catástrofe de su historia, se fue hasta su clínica para conocer el estado de los animales que tenía internados.

View this post on Instagram

A post shared by Me dicen Cuesti (@cuestionatee)

En una imagen que se vio en la pantalla de TN, y que luego se hizo viral, el veterinario llevaba en una mano una jaula con algunos animales y en la otra, un palo, que utilizaba para tantear el terreno que no podía verse debido al nivel del agua. “Estuve toda la mañana pensando, no los podía dejar ahí, me parte el corazón”, dijo en referencia a los animales. El centro de internación que dirige quedó inutilizable, “es el laburo de muchos años”, decía entre lágrimas, “por suerte mi casa está bien, pero la veterinaria está destrozada”.

“Perdimos prácticamente todo, salvo las camillas que son metálicas, todo lo demás lo tuvimos que tirar”, detalló luego en una entrevista en Radio Nacional.

Coccia es fundador de la Unidad de Sanidad Animal Unisan y en la veterinaria que dirige habían quedado atrapados un gato y un perro. Además, en el momento de la tormenta, estaba preocupado por el paradero de dos compañeros de trabajo.

“Cuando empezó todo, era un caos, ni yo sabía lo que le pasaba al otro, ni los demás sabían lo que me pasaba a mí, porque no había ningún tipo de comunicación. Sabías dónde era probable que estuviera una persona, pero no podías estar seguro”, contó.

Su única certeza era que dos compañeros se habían quedado con los animales, pero no sabía en qué condiciones, así que ni bien pudo y luego de un par de intentos frustrados por la fuerte corriente, acudió al lugar.

“Mis compañeros habían podido salir una hora antes, cosa que yo no sabía cuando llegué. Habían dejado a las mascotas de forma segura, para que puedan estar algunas horas más, pero igualmente decidí llevarlos”.

“Uno de los animales ya estaba muy complicado y yo decidí llevarlo sabiendo que era muy probable que tuviera un mal desenlace, cosa que ocurrió pero de todas maneras quise que al menos no muera sólo. El otro es un gatito que había tenido un procedimiento bajo anestesia y por eso era importante que esté monitoreado, así que me lo llevé”.

Adrián Coccia (37), veterinario conocido entre los vecinos del barrio Macrocentro de Bahía Blanca, sufrió la destrucción de su veterinaria. Se hizo viral por un video en redes sociales.

Adrián explicó que la casa funciona como una clínica de animales y brinda un servicio de internación nocturna, por eso las mascotas estaban allí desde el día anterior.

Además del perro y el gato que se llevó, había allí otros dos perros grandes, que estaban a punto de ser dados de alta y se quedaron hasta el día siguiente, hasta que los dueños los pudieron buscar.

“Era imposible que me pudiese llevar a los cuatro animales con el agua que me llegaba hasta la cintura. De todos modos, si lo hubiera considerado necesario, quizá hubiese vuelto por ellos más tarde”. A la noche, cuando el agua había bajado un poco, un compañero pudo ir a verlos”, explicó.

Adrián Coccia (37), veterinario conocido entre los vecinos del barrio Macrocentro de Bahía Blanca, sufrió la destrucción de su veterinaria. Se hizo viral por un video en redes sociales.

Su intención es reabrir la veterinaria utilizando otros consultorios que posee, de menor complejidad. “Si bien no tenían tanta preparación, yo calculo que un mes vamos a poder ponerlos en condiciones para seguir trabajando desde ahí”. Sin embargo, “esos centros también están dañados y se necesita inversión para volver a abrirlos”.

A pesar del gasto que conlleva, Adrián no quiere recibir donaciones: “Lo que pasa es que uno camina dos cuadras más y se da cuenta que yo pude haber perdido mi veterinaria pero hay gente que perdió su casa, vidas se perdieron…”.

“Prefiero que ayuden con el alias del municipio, porque sé que la ayuda va a llegar al que más lo necesita. Mi trabajo depende de que la gente esté bien y pueda tener y cuidar a sus mascotas, en definitiva me van a estar ayudando a mi también, si se recupera mi ciudad yo se que mi trabajo lo voy a recuperar”, concluyó.