En el municipio de Kasterlee ubicado en Amberes, Bélgica, cientos de competidores se disfrazan todos los años para disputar la carrera de calabazas gigantes talladas a mano en un estanque ubicado en el norte del país. Esta competición, que comenzó en el año 2008, fue creada por los agricultores locales debido a que contaban con una producción de más de 400 kilos de este fruto y no sabían qué hacer con el excedente.
Dries Molans, coorganizar de la carrera de calabazas, le dijo a Reuters: “Las reglas son razonablemente sencillas”. Y también añadió: “Los equipos están formados por cuatro personas que reman en una calabaza durante una vuelta y le pasan el remo a su compañero, que también da una vuelta”.
Ver esta publicación en Instagram
Se estima que participaron alrededor de 300 competidores repartidos en más de 75 equipos en la edición que se celebró este 2024, la cual se realizó el pasado día domingo. Luego de la carrera, las calabazas fueron transformadas en abono y sus semillas fueron guardadas para ser utilizadas en futuras cosechas, según consignó CNN.
Por otro lado, Paul Boonen, presidente de la Sociedad de Calabazas local, le comentó al mismo medio en años anteriores que esta actividad creció en popularidad durante los últimos años. Además, contó que cada vez es más difícil encontrar calabazas adecuadas para realizar esta actividad debido a que ahora los frutos son cada vez más grandes para flotar.
“Mi novio me contó sobre este evento en una de nuestras primeras citas y pensé que era muy gracioso”, contó Clara De Somer, una concursante del año 2022 quien se disfrazó de tiburón. Por otro lado, Jonas Verbruggen, otro de los competidores de ese año que desgraciadamente cayó al agua, añadió: “Cuando remas, no se mueve hacia adelante, sino que empieza a girar”.