El tráfico aéreo en América Latina alcanzó cifras históricas durante julio, con Argentina liderando el crecimiento porcentual y la región consolidándose como referente mundial en la recuperación y expansión del sector.
De acuerdo con datos de la Asociación de Líneas Aéreas de América Latina y el Caribe (ALTA), el volumen de pasajeros superó ampliamente los niveles previos a la pandemia, impulsado por el dinamismo de los principales mercados y una marcada preferencia por las rutas intrarregionales.
Las aerolíneas latinoamericanas registraron en julio un crecimiento interanual del 7,2%, el más alto a nivel global por segundo mes consecutivo. Este desempeño se reflejó especialmente en Argentina, que experimentó un aumento del 8,3% en el tráfico doméstico y del 14% en el internacional respecto al mismo mes del año anterior.
El país alcanzó un nuevo máximo histórico para un mes de julio, situándose un 6% por encima de las cifras de 2019. En el acumulado de enero a julio, Argentina sumó 19 millones de pasajeros, lo que representa un incremento del 14,7% frente al mismo periodo de 2024.
A nivel regional, el tráfico aéreo en América Latina y el Caribe llegó a 42,8 millones de pasajeros en julio, lo que supone un aumento interanual del 4,4% y 1,8 millones de viajeros adicionales en comparación con el año anterior.
Este ritmo de expansión superó al registrado en junio, con un punto porcentual más, y consolidó el liderazgo de las aerolíneas con base en la región en la recuperación global del sector.
Además de Argentina, Panamá, Perú y Brasil lideraron el crecimiento porcentual en los mercados de mayor volumen.
“Que las aerolíneas latinoamericanas registren un crecimiento interanual del 7,2% en julio —el más alto a nivel mundial por segundo mes consecutivo— refleja no solo la fortaleza de nuestra industria, sino también la confianza de los viajeros en la conectividad que ofrece la región. Más del 60% del incremento neto interanual de pasajeros de julio provino de rutas intrarregionales, lo que demuestra un mercado cada vez más dinámico», señaló Peter Cerdá, CEO de ALTA.
En cuanto a Argentina en particular, uno de los motores de la expansión en el último año fue la desregulación del sector aerocomercial. Entre las medidas tomadas, se encuentra la política de Cielos Abiertos. Por caso, recientemente, el Gobierno firmó un acuerdo bilateral con El Salvador que establece las bases para la apertura entre ambos países, con el fin de promover la conectividad, incrementar las opciones de vuelos y atraer nuevas líneas aéreas.
Ya son 27 los países que se sumaron a esta política desde la llegada del nuevo gobierno. Anteriormente, se celebraron acuerdos con países de cuatro continentes: Brasil, Chile, Perú, Ecuador, Canadá, Panamá, Uruguay, Paraguay, México, Colombia, Ruanda, República Dominicana, Etiopía, Qatar, Islandia, Turquía, Emiratos Árabes Unidos, Chipre, Luxemburgo, República Checa, Alemania, Honduras, Guyana, Letonia, Rumania, Serbia y El Salvador.
Se trata de un régimen de frecuencias ilimitadas, con derechos de tráfico que autoriza a las líneas aéreas a realizar vuelos de cabotaje, tanto para vuelos regulares de pasajeros y carga, como para vuelos no regulares y de carga exclusiva.
“La desregulación del sector aéreo a través de la política de Cielos Abiertos implementada por el Gobierno Nacional, no solo favorece el desarrollo del sector aéreo y la apertura del mercado aerocomercial con el fin de fomentar la conectividad regional y global, sino que también potencia el turismo y atrae inversiones en el sector”, asegura la Secretaría de Transporte.
“Como resultado de estas políticas, desde el inicio de la gestión se establecieron 38 nuevas conexiones internacionales que ya se encuentran operativas, fomentando un entorno de libre mercado e impulsando el desarrollo del turismo. De esta forma, se continúa avanzando en la apertura del sector aerocomercial, ampliando la oferta de vuelos en beneficio de empresas y pasajeros”, añade.