El presidente iraní Masoud Pezeshkian saluda al ministro de Defensa de Arabia Saudita, Khalid bin Salman (West Asia News Agency)/Handout via REUTERS/Archivo)

En las últimas horas surgieron detalles desconocidos de la reunión a puertas cerradas que ministros saudíes e iraníes celebraron en Teherán el 17 de abril, según fuentes del Golfo y funcionarios persas. El ministro de Defensa de Arabia Saudita, el príncipe Khalid bin Salman, entregó un mensaje directo al liderazgo iraní, instando a considerar la oferta del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, para negociar un acuerdo nuclear y evitar riesgos de conflicto con Israel.

La decisión de enviar la delegación recayó en el rey Salman bin Abdulaziz, quien solicitó transmitir la advertencia al líder supremo iraní, el ayatolá Ali Khamenei. Entre los presentes en la reunión figuraron el presidente iraní Masoud Pezeshkian, el jefe del Estado Mayor Mohammad Bagheri y el ministro de Relaciones Exteriores Abbas Araghchi.

Un reporte del Times of Israel indica que las cuatro fuentes consultadas apuntaron que el príncipe Khalid, ex embajador saudí en Washington, trasladó el mensaje de que el gobierno estadounidense mantenía escasa disposición para negociaciones prolongadas. Trump, días antes, había anunciado la apertura de conversaciones directas con Teherán para frenar el programa nuclear iraní a cambio del levantamiento de sanciones.

El ministro saudí señaló que sería preferible alcanzar un acuerdo con Washington antes que enfrentar la posibilidad de un ataque israelí si las negociaciones fracasaban. También advirtió que el tiempo para lograr avances diplomáticos era limitado.

El contexto regional incluyó advertencias de mandatarios de Arabia Saudita, Qatar y Emiratos Árabes Unidos, quienes transmitieron a Trump su rechazo a una acción militar contra las instalaciones nucleares iraníes durante su viaje al Golfo a inicios de mes.

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, camina para abordar el Air Force One mientras sale de la base aérea de Al Udeid, en ruta a Abu Dhabi, Emiratos Árabes Unidos, en Doha, Qatar. 15 de mayo de 2025. REUTERS/Brian Snyder

Fuentes consultadas no precisaron el impacto inmediato del mensaje saudí sobre el liderazgo iraní. Durante la reunión, Pezeshkian confirmó el interés de Irán en obtener alivio de sanciones, pero subrayó que Teherán no detendría su programa de enriquecimiento de uranio.

Funcionarios iraníes expresaron reservas respecto al enfoque del gobierno de Trump, que alternó entre permitir un enriquecimiento limitado y exigir el desmantelamiento total del programa nuclear iraní. El presidente estadounidense había amenazado con recurrir a la fuerza militar si la negociación fracasaba.

Las autoridades saudíes, iraníes e israelíes no respondieron a las solicitudes de comentarios. La Casa Blanca tampoco confirmó oficialmente si tenía conocimiento de la advertencia saudí.

El presidente estadounidense Donald Trump y el príncipe saudí Mohammed bin Salman en Riad, Arabia Saudí, el 13 de mayo del 2025. (AP foto/Alex Brandon)

La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, reiteró la posición de Trump sobre la necesidad de alcanzar un acuerdo o afrontar consecuencias graves.

Irán sostiene que no busca desarrollar armas nucleares, aunque ha enriquecido uranio a niveles sin aplicación civil reconocida y limitó el acceso de inspectores internacionales a sus instalaciones. El diálogo entre Washington y Teherán, que abarca cinco rondas, mantiene puntos de desacuerdo sobre el enriquecimiento.

Un funcionario estadounidense señaló que persisten discrepancias sobre la estrategia a seguir, mientras que medios estadounidenses reportaron la preocupación de Israel ante un posible cambio en la postura de Estados Unidos respecto al programa nuclear iraní.