Hace varias semanas, la tensión entre los hermanos Alex y Charlotte Caniggia no da tregua y el conflicto sigue escalando, ahora con nuevas declaraciones desde el aeropuerto de Ezeiza. Todo comenzó tras los polémicos dichos de la mediática sobre Melody Luz en redes sociales, lo que llevó a Alex a poner punto final a su relación con su hermana; desde ese momento, ambos cortaron por completo el contacto. El destino quiso que, a pesar de la distancia y la pelea, tengan que verse cara a cara debido a un compromiso profesional en China junto a Marley en el programa Por el Mundo (Telefe).

En el aeropuerto de Ezeiza, minutos antes de abordar su vuelo y ante la atenta mirada de cronistas de Puro Show (El Trece), Alex no esquivó ningún tema. “Yo estoy en mi mejor momento, en mi prime. Yo siempre estoy bien, cada vez mejor. Imaginate, ahora estoy viajando a China en primera. En el gallinero nunca viajo, aunque me gustaría en algún momento tener la experiencia”, lanzó el mediático, fiel a su estilo provocador. La pregunta de los periodistas apuntó directo al vínculo fraterno: cómo iba a ser la dinámica del viaje.

Sin filtros, respondió: “La voy a tener que ver arriba, pero desde que me peleó, desde que puso las historias contra Melody, yo decidí bloquearla, no le hablé más”.

Alex decidió priorizar a su familia luego del conflicto con su hermana Charlotte (Instagram)

La conversación avanzó, revelando la postura del mediático. “¿Se van a reconciliar? ¿Quién crees que va a aflojar antes?”, insistieron los noteros, a lo que él contestó: “No lo sé, puede ser. Ella va a aflojar antes. Se peleó con Melody por boludeces, vi las historias esas y la bloqueé”. El influencer insistió: “Yo pedí viajar en vuelos separados, pero no se pudo. Ella es mi hermana, obvio que la quiero, pero pasaron varias cosas y nos distanciamos. No me duele. Si alguien se porta mal y yo no hice nada no voy a meterme ahí. Yo priorizo a mi pareja y a mi hija”.

Tampoco esquivó hablar sobre su madre, Mariana Nannis, quien arrastra un largo enfrentamiento con Luz. Al ser consultado por su relación con ella, fue categórico: “No, nada, hace años”.

El ambiente se tornó más denso al recordar que, antes de esta separación, Melody y su cuñada mantenían una relación de cercanía, viéndose juntas en numerosas ocasiones. La grieta se profundizó tras la reconciliación de Melody con Alex, cuando la bailarina visitó el streaming de Martín Cirio y confesó cómo se sentía respecto a Charlotte: “Ya la tengo a Mariana. Ya lo tengo a Alex. ¿Una más que me venga a pelear? No”, confesó sobre el desgaste del vínculo familiar. Ante la consulta sobre la posibilidad de alguna comida familiar, se limitó a ironizar: “¿Nunca hay juntada a comer ravioles los domingos?”, deslizó.

La charla avanzó y la bailarina profundizó aún más en los motivos detrás del conflicto: “No es nada personal. Es algo de ella que es peleona. Lo que siento. No sé si va a caer mal o bien. No me importa, es lo que yo siento, que también le hace falta terapia, porque tiene muchas cosas, pero no cree en terapia. ¿Entonces qué hace? Se autoboicotea sus relaciones. Porque yo siempre tengo la mejor onda con ella. Y de la nada me busca pelea por… Si te digo vas a decir: ‘no, ¿en serio?’. O sea, muy bol…”.

La respuesta no se hizo esperar. Charlotte recogió el guante y usó sus historias de Instagram para retrucar con dureza: “Que me mande a terapia una persona que acusó falsamente de violencia al Tucu López, a mi hermano, al cocinero (Santiago del Azar), cuando la única agresiva y conflictiva es ella, no sé si me da gracia o lástima, y a mi familia no la unió, al contrario, la desunió más. Payasa sos, das asco”, acompañando el mensaje con el emoji de un payaso. Luego, fue aún más allá y disparó: “Querías usurpar y quedarte con el departamento del Faena y gracias a Dios mi mamá se avivó. Ojo de loca no se equivoca. Mejor me callo, que tengan linda noche”.

La respuesta de Charlotte ante los dichos de Melody Luz (Instagram)

La novela familiar entre los hermanos Caniggia, Melody y Mariana sigue sumando capítulos, marcados por el escándalo público, los bloqueos y los reproches, mientras todos los involucrados emprenden un viaje internacional con heridas todavía abiertas y una reconciliación que, por ahora, parece imposible.