En medio de la guerra comercial y luego de que EEUU aplicara un arancel del 76,4% a Brasil para ingresar al mercado norteamericano, el país vecino está redirigiendo sus ventas de carne a China, lo que afecta las exportaciones argentinas al gigante asiático, principal destino. Se da en un contexto favorable en cuanto a los precios internacionales.
China y Brasil, junto a la India, son las economías más grandes del BRICS, un bloque económico con el que Beijing busca desafiar a EEUU y a las economías occidentales.
Durante julio, las exportaciones argentinas de carne vacuna alcanzaron 62.200 toneladas, con un valor cercano a USD 346,9 millones. Este desempeño representa una leve disminución del 1% en volumen respecto a junio, pero un incremento del 5,5 % en valor, impulsado por una mejora en los precios internacionales.
Si se compara con igual mes de 2024, el crecimiento resulta aún más marcado: el volumen exportado aumentó un 9,7% y el valor facturado se elevó un 51,7%, con una recuperación significativa en los precios. El precio promedio por tonelada exportada en julio fue de USD 5.577, un 6,6% más que en el mes anterior y un salto interanual del 38,2 por ciento.
Este repunte en los valores unitarios permitió que, a pesar de una caída acumulada del 14,5% en el volumen exportado durante los primeros siete meses del año (con 376.245 toneladas embarcadas), la facturación total ascendiera a USD 1.943 millones, un 17,6% más que en igual período de 2024.
El valor promedio de la tonelada exportada en lo que va de 2025 aumentó un 35% interanual, pasando de USD 3.835 en 2024 a 5.165 dólares. El análisis por segmentos revela que los cortes de mayor valor —carne deshuesada, fresca o refrigerada— experimentaron una mejora interanual del 23% en el período.
En el caso de los productos congelados sin hueso, donde China concentra el 76% de los embarques, el incremento interanual alcanzó aproximadamente el 40 por ciento.
Quiebre de tendencia
Pero aunque China continúa absorbiendo más del 70% del volumen exportado por Argentina, julio marcó un quiebre en la tendencia de recuperación de los tres meses previos. Las ventas a este destino sumaron 44.842 toneladas, lo que representa una disminución del 7% respecto a junio.
Según la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), la incipiente tendencia negativa “podría volver a agudizarse en agosto, tal como se especulaba, a raíz de la disrupción comercial causada por los aranceles adicionales impuestos por EEUU y la reacción comercial esperable de uno de los países más afectados: Brasil”.
En este sentido, julio parece haber sido un mes de transición. Los embarques de carne vacuna desde Brasil hacia China registraron un aumento del 18% entre junio y julio, sumándose a un primer semestre de intensa actividad comercial con ese país asiático, donde el volumen embarcado superó en un 15% al de 2024, alcanzando las 790.000 toneladas.
Barrera trumpista, salida china
Desde agosto, Brasil enfrenta un arancel final del 76,4% para ingresar al mercado estadounidense, nivel que hace inviable el negocio. Esto obliga al país vecino a buscar nuevos destinos para sus excedentes, generando un reacomodamiento de flujos que impacta en toda la región.
En este contexto, el informe deña BCR destaca: “China se presenta como el principal mercado al que Brasil intentará canalizar la mayor parte de sus excedentes, más allá de otros destinos asiáticos como Vietnam, Filipinas e Indonesia, donde en los últimos meses ha consolidado importantes avances en el desarrollo de nuevas estrategias de acceso a mercado”.
Para Argentina, cuya exposición comercial a China es elevada, el reposicionamiento de Brasil en ese mercado adquiere especial relevancia, considerando también la pérdida de competitividad registrada durante el último año.
Los datos preliminares de agosto, basados en las certificaciones de exportación emitidas por el SENASA hacia China, ya anticipan una nueva retracción en los volúmenes potencialmente exportables. Además, otro factor a monitorear es el crecimiento de los stocks de carne vacuna importada en los almacenes chinos, lo que podría incidir en la demanda futura.
Hasta julio, las exportaciones argentinas de carne vacuna a todos los destinos sumaron 376.245 toneladas, unas 54.500 toneladas menos que en igual período de 2024.
Para igualar el total exportado en todo 2024 —769.000 toneladas—, sería necesario incrementar el ritmo actual de embarques en un 25% durante los próximos meses, una meta que se presenta desafiante ante el nuevo escenario comercial que se configura.