Agustín “Cachete” Sierra creció frente a cámara. Desde muy chico, su rostro se volvió parte del imaginario de varias generaciones: Chiquititas, Floricienta, Rebelde Way, Casi Ángeles. Durante años, la actuación fue para él un juego, una aventura compartida con amigos y compañeros que, sin darse cuenta, se transformó en un oficio. Pero hubo un momento en el que se preguntó si realmente eso era lo que quería para su vida.
Esa frase, “Cada vez que me pierdo un poco, lo vuelvo a leer”, resume una búsqueda que lo acompaña desde joven: la necesidad de reconectarse con su pasión.
En ese punto de inflexión, llegó un libro que lo acompañó a mirar hacia adentro: El Alquimista, de Paulo Coelho. “Es un libro que te conecta con tus sueños”, resume. Lo leyó por primera vez cuando todavía era adolescente, en una etapa en la que, como muchos, intentaba entender quién era y qué quería hacer con su futuro. “Hubo momentos puntuales en donde me ayudó, en donde a veces estaba medio perdido con lo que quería”, confiesa Cachete.
“Me llegó este libro de joven, me lo regaló mi papá para unas vacaciones. Tiene una dedicatoria.” Aunque ya a los nueve años su historia profesional estaba en movimiento, el libro llegó cuando empezaba a hacerse preguntas más profundas. “Yo empecé a trabajar de muy chico y para mí era un juego. Después me di cuenta de que era lo que amaba y lo que quería seguir haciendo toda mi vida. Y el libro me ayudó a decidir realmente si era lo que a mí me vibraba y era lo que yo sentía o si era simplemente algo que había empezado a hacer de chico y que me salía bien”, confiesa, dejando entrever los cuestionamientos que tenía desde pequeño.
El concepto de El Alquimista es simple y universal: seguir los sueños, incluso cuando el mundo parece poner obstáculos. Para Cachete, ese mensaje fue determinante. “Creo que el concepto es lo que hace que este libro sea uno de mis favoritos: ir en búsqueda de tus sueños.”
Esa idea lo acompañó en momentos de incertidumbre, en los que necesitó reafirmar su propósito o reencontrar motivación. “Yo recomiendo este libro porque creo que puede ayudar a muchos en eso que piensan, sienten y que a veces no se animan. Te hace abrir los ojos. A veces, cuando uno está medio sesgado o confundido por el ruido, está bueno volver a leerlo.”
El actor defiende la idea del proceso, de los pasos intermedios que te van moldeando. “La gente dice ‘mirá qué culo’, pero no pasó por todo un proceso hasta que realmente sos consciente de lo que querés y das todo por eso. Pero el proceso seguramente fue difícil.”
Hay libros que llegan en el momento justo y se quedan para siempre. En el caso de Sierra, el de Paulo Coelho se volvió un refugio, una especie de búsqueda de propósito: los sueños no se cumplen de casualidad, hay que animarse a buscarlos. Y cada vez que siente que se desvía, vuelve a esas páginas para recordarle quién es y hacia dónde va.