Uno de los ejecutivos de la entidad empresaria más grande del mundo, la Cámara de Comercio de los Estados Unidos, consideró este martes que las elecciones en ese país tendrá un impacto en la región y aseguró que entre Washington y la Argentina “gane quien gane, la relación va a ser brillante”. Así lo dijo Neil Harrington, vicepresidente de las Américas de esa organización, en el foro organizado por la consultora Abeceb.
En una entrevista desde Washington, moderada por el consultor político Juan Germano, fundador de Isonomía, Harrington mencionó que más allá de las diferencias que pueda tener cada candidato sobre la mirada y políticas que tengan hacia América Latina, “las muy buenas noticias, como bien dijo nuestro embajador Marc Stanley, gane quien gane la relación va a ser muy fuerte”. “Tenemos que resolver problemas importantes juntos (a nivel mundial) como la inseguridad alimenticia y energética. Argentina tiene un gran potencial para eso. Hay que enfrentar el autoritarismo en lugares como Venezuela, Nicaragua y Cuba. Gane quien gane la relación va a ser brillante partir del 20 de enero”, cuando asuma el nuevo gobierno, dijo Harrington.
El ejecutivo de la US Chamber of Commerce, que también fue miembro del consejo de negocios entre Estados Unidos y Argentina, Colombia y Cuba, aseguró que el clima que se vive en este martes electoral en ese país es de “preocupación y hasta esperanza en muchos”. “El ambiente está un poco tenso, no se puede negar”, reconoció el ejecutivo, quien anticipó que se espera que este turno electoral termine con números récord de participación, al considerar que el voto no es obligatorio en los Estados Unidos.
Respecto a los elementos que podría favorecer a Kamala Harris o a Donald Trump, Harrington apuntó que “el voto femenino es central para los demócratas, si hay un grupo enorme que participa sería una ventaja para Harris, y al contrario, si hay un voto masculino que llega a las urnas, sería favorable a Trump”, consideró y opinó que entre los siete estados que definen la elección –porque la preferencia puede cambiar entre distintas votaciones– “Pensilvania es el más importante porque es el que más votos electorales tiene entre ellos y por eso concluyeron hoy mismo sus campañas ahí”.
De todas formas, el vicepresidente para la región de la cámara empresaria de comercio fue consultado sobre qué visión distinta podría tener cada candidato hacia América Latina. “La política hacia la región va a ser más o menos igual entre los dos. La diferencia sería en términos de migración. Trump habla mucho de cerrar la frontera a todo costo y Harris tuvo responsabilidad en la estrategia de (Joe) Biden de abordar los temas migratorios de la región”, durante el gobierno actual.
“Gane quien gane, la estrategia tiene que ser bien pensada para América Latina. Las últimas dos administraciones solo lo hicieron en la segunda parte de sus mandatos. El próximo presidente tendrá un entorno global complejo, tenemos prioridades como el near shoring que es una oportunidad económica casi inédita. Y se necesitan inversiones para modernizar infraestructura clave, tenemos un potencial para la seguridad energética y alimentaria y necesitamos inversión estadounidense para eso también y ayudar desafíos como migración o el Estado de derecho. Esto tiene que empezar el 20 de enero para el próximo gobierno”, continuó Harrington.
Respecto a la política que tendrán hacia China, el ejecutivo planteó que “cualquier administración va a tener una estrategia muy enfocada sobre China para mantener el comercio que existe entre los dos países. Pero no cabe duda de que va a haber en el Congreso y de parte de cualquier administración una campaña para imponer más aranceles, sobre todo en las áreas de seguridad nacional”, anticipó. “Tiene que ver con nuestros aliados también. Cualquier de los dos aplicaría presión a los aliados para mantener relaciones que restrinjan la participación de China. También en defensa e infraestructura crítica”, dijo.
Por último, consultado por Germano sobre la relación que tienen los norteamericanos con la democracia y el statu quo –el lema de este año en el Foro Abeceb es “La batalla del año, Statu Quo vs. Cambio cultural”–, Harrington afirmó que “la discusión es global, no cabe duda de que todos, incluso desde el sector empresarial, creemos que el status quo no está funcionando”.
“Los dos candidatos tratando de acercarse a los pueblos que se sienten alejados del progreso. Para nosotros es muy importante la discusión en ese sentido: cómo van a seguir las alianzas que EEUU persigue, qué vamos a hacer para preservar la democracia, qué vamos a hacer para asegurar en los pueblos más vulnerables que estén experimentando un crecimiento sostenido e inclusivo”, concluyó.