La Iglesia Católica celebra el Día de San Zacarías y Santa Isabel cada 5 de noviembre con el fin de conmemorar a quienes fueron padres de San Juan Bautista y tíos de Jesús. Esta es una de las parejas consideradas como santos esposos, de acuerdo al Nuevo Testamento, como José y María o Ana y Joaquín. El catolicismo los considera un símbolo de fe, cuya historia evidencia la virtud de Dios.

La historia de Zacarías e Isabel

De acuerdo al Evangelio de Lucas, Zacarías provenía de una familia religiosa de la clase sacerdotal de Abías, uno de los reyes del Reino de Judá. Decidió continuar con su legado familiar y se formó como sacerdote, para ocupar ese puesto en el templo de Jerusalén. Por su parte, Isabel era descendiente de Aarón, hermano de Moisés, y prima de la Virgen María. La pareja no conseguía formar la familia que deseaban, ya que Isabel no podía tener hijos, algo que era motivo de discriminación en aquel contexto.

Santa Isabel era la prima de la Virgen María

Durante una jornada laboral, Zacarías debió ingresar al Sancta Sanctorum. Se trata del sector más sagrado del templo de Jerusalén, al que los sacerdotes acceden únicamente para orar. Mientras realizaba su rezo, presenció la aparición de un ángel que le advirtió que su esposa tendría un hijo que llevaría el nombre de Juan. Dado que la pareja era anciana, Zacarías cuestionó su mensaje y el ángel le contestó: “Yo soy Gabriel y estoy a las órdenes de Dios. He sido enviado para hablar contigo y darte estas buenas noticias. Pero como no creíste en mis palabras, las cuales se cumplirán a su debido tiempo, te vas a quedar mudo. No podrás hablar hasta el día en que todo esto suceda”. En efecto, el futuro padre permaneció sin poder hablar y pronto se enteraría de que Isabel estaba esperando su primogénito.

La Visitación de la Virgen

Fue luego de la Anunciación, cuando el ángel Gabriel le dio la noticia a la Virgen María que sería madre de Jesús, cuando ella decidió visitar a su prima Isabel de manera espontánea. Caminó kilómetros hacia Juda, una ciudad ubicada en una región montañosa que se ubica a seis km de Jerusalén. Este hito es conocido como la Visitación de la Virgen y cuenta con su propio pasaje en el Evangelio de Lucas.

La Visitación de la Virgen María a su prima Isabel es una de las escenas más recordadas de los Evangelios

Los motivos de este viaje cuentan con varias teorías, ya que algunas afirman que María deseaba ayudar a su pariente, quien ya se encontraba cursando un embarazo con avanzada edad. Otras creencias fundamentan que la Virgen deseaba compartir su experiencia con Isabel, ya que ambas habían recibido la anunciación del ángel Gabriel. Su hijo, Juan Bautista, nació seis meses antes que Jesús, por lo que se celebra cada 24 de junio.

Cántico de Zacarías (Benedictus)

De acuerdo a la Agencia Católica de Informaciones- ACI Prensa, el siguiente texto sirve para rezarle a Santo Zacarías:

Bendito sea el Señor, Dios de Israel,

porque ha visitado y redimido a su pueblo,

suscitándonos una fuerza de salvación

en la casa de David, su siervo,

según lo había predicho desde antiguo

por la boca de sus santos profetas.

Es la salvación que nos libra de nuestros enemigos

y de la mano de todos los que nos odian;

realizando su misericordia

que tuvo con nuestros padres,

recordando su santa alianza

y el juramento que juró a nuestro padre Abrahán.

Para concedernos que, libres de temor,

arrancados de la mano de los enemigos,

le sirvamos con santidad y justicia,

en su presencia, todos nuestros días.

Y a ti, niño, te llamarán profeta del Altísimo,

porque irás delante del Señor

a preparar sus caminos,

anunciando a su pueblo la salvación,

el perdón de los pecados.

Por la entrañable misericordia de nuestro Dios,

nos visitará el sol que nace de lo alto,

para iluminar a los que viven en tinieblas

y en sombra de muerte,

para guiar nuestros pasos

por el camino de la paz.