Durante la tarde del lunes festivo 4 de noviembre, con una sencilla ceremonia, en Oslo (Noruega) se conmemoraron los ocho años de la firma del acuerdo de paz entre el Estado colombiano y la extinta guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc).
Al evento, que se llevó a cabo en la sede del Instituto Nóbel, en la capital del país nórdico, asistieron el ministro de Relaciones Exteriores, Luis Gilberto Murillo, y el último máximo jefe del desaparecido grupo insurgente, Rodrigo Londoño, también recordado por su antiguo nombre de guerra Timoleón Jiménez ‘Timochenko’.
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”Desde el Instituto Nobel de Noruega, el Canciller @LuisGMurillo participó en el evento Acuerdo de Paz de Colombia, ocho años después: un ejemplo para el mundo y lecciones aprendidas. ¡Seguimos posicionando al país como un modelo de paz y reconciliación en todo el mundo! (sic)”, informaron del evento en la cuenta oficial de la red social X de la Cancillería.
Detallaron que durante la ceremonia también se socializaron “los avances en la implementación del Acuerdo de Paz de 2016″ donde el “acompañamiento internacional”, siendo Noruega uno de los garantes, fue crucial para lograr que la que se consideró como la guerrilla más antigua del mundo abandonara la lucha armada.
“También se presentaron los desafíos y el nuevo marco estratégico para resignificar el Acuerdo a través del “Plan de Respuesta Rápida” (sic)”, informaron en la red social.
Señalaron de esta manera el país reafirmó “su compromiso con la Paz Total ante el mundo, compartiendo logros y desafíos para que la comunidad internacional acompañe y respalde este proceso que sigue transformando al país”.
“Es muy simbólico que estemos aquí donde se reconoce a los constructores de paz del mundo. Para el Gobierno del Cambio y de nuestro presidente, Gustavo Petro, y nuestra vicepresidenta, Francia Márquez, la implementación del acuerdo de paz es central. Hay que resignificarlo para que sea la base de la política de Paz Total”, expresó el Canciller durante el evento.
Entre tanto el Ministro de Relaciones Exteriores de Noruega, Espen Barth Eide, recordó que su nación sigue apoyando los procesos para que cese la violencia en Colombia.
“Con Cuba se facilitó (el proceso) y se dio el espacio para que se pudieran encontrar, para que a veces se aportaran ideas, pero siempre respetando el papel principal de los negociadores. Decidimos entonces que lo íbamos a seguir apoyando, incluso después de la firma del acuerdo. Si algo hemos aprendido es que si es difícil lograr el acuerdo, todavía lo es más su implementación”, expresó el homólogo de Murillo.
Sobre el acto conmemorativo, Rodrigo Londoño expresó su satisfacción por lo que se ha logrado con la decisión que tomaron de apostarle a la paz, aunque su implementación ha estado llena de controversias.
“En el Instituto Nobel de Paz de Oslo, en Noruega, hemos conmemorado junto a la comunidad internacional 8vo Aniversario de la firma del Acuerdo de Paz entre el Estado colombiano y las extintas FARC-EP. A pesar de las dificultades, seguimos luchando por la paz con justicia social (sic)”, expresó en su cuenta oficial de X.
El que encabezara al último secretariado de la extinta guerrilla le agradeció al Gobierno noruego por el apoyo que han brindado desde que el expresidente Juan Manuel Santos, al que le entregaron el Premio Nóbel de Paz por ese proceso, decidiera sentarse a dialogar con los insurgentes para que abandonaran las armas.
“Noruega, país aliado, amigo y apoyo incondicional e imprescindible de la paz de Colombia. Gracias, siempre, infinitas gracias (sic)”, publicó en la red social.
Aunque los nuevos procesos de paz que impulsa el Gobierno Petro con la mayoría de grupos armados organizados que tienen injerencia en el territorio nacional pasan por complicaciones, en la opinión pública la mayoría aún se inclina a que se siga insistiendo en la salida negociada al conflicto.