VALENCIA.- Luego de tener que ser evacuado en medio de insultos y agresiones de los ciudadanos tras su visita a las regiones más afectadas por las inundaciones en Valencia, el presidente español Pedro Sánchez lamentó el “sufrimiento” que atraviesan los damnificados pero también condenó la “violencia”, en referencia a los disturbios durante su visita y la de los reyes Felipe VI y Letizia.
“Quiero, en primer lugar, trasladar toda nuestra solidaridad y el reconocimiento por parte del gobierno de España, de la angustia y el sufrimiento de los afectados”, dijo el líder socialista tras reunirse con los responsables de las operaciones de rescate en Valencia.
Escoltado por oficiales a caballo que trataron de mantener controlada a la multitud, el presidente del gobierno español llegó al municipio de Paiporta casi cinco días después de que comenzaron las inundaciones. Allí fue recibido por varias decenas de personas que lo abuchearon y le tiraron desde barro hasta palos, entre otros objetos.
Al mismo tiempo, el palacio de La Moncloa publicó un comunicado en el que confirmó que el tanto el presidente Sánchez como su entorno “se encuentran bien” tras los momentos de tensión vividos en la ciudad de Paiporta. ”Mientras caminaba por las calles de Paiporta, la comitiva fue objeto de insultos y agresiones por parte de un grupo de personas. Algunos arrojaron barro y otros objetos. En ese momento, la escolta del primer ministro activó el protocolo de seguridad y lo trasladó al Puesto de Mando Avanzado”, explicó el mensaje.
La región, que tiene una población de 30.000 habitantes, todavía tiene muchas calles completamente obstruidas con escombros, autos destrozados y barro acumulado. Hasta el momento -y según informaron las autoridades- se reportaron más de 200 personas fallecidas y miles de hogares que quedaron destruidos y tuvieron que ser evacuados.
Los reyes de España, en tanto, sufrieron incidentes similares durante su visita a la zona afectada este domingo. Su llegada no fue bien recibida por los vecinos, que se mostraron enojados por la falta de asistencia que brindaron desde el Estado y de la casa real. Pese a los gritos de “asesinos” y otros insultos, los monarcas hablaron con los sobrevivientes de la tragedia mientras eran custodiados por sus guardaespaldas. La reina Letizia se mostró visiblemente emocionada.
Finalmente, y luego de aproximadamente media hora de tensión, los reyes se subieron a los autos oficiales y se alejaron con una escolta de la policía montada, mientras los coches eran golpeados por algunos de los manifestantes.
La indignación de los vecinos tiene que ver con lo que ellos consideran una “mala gestión” del Estado en el marco del peor desastre natural en la historia de España. En tanto, los trabajos de limpieza y remoción de los escombros para poder volver a sus hogares la realizan los mismos residentes y miles de voluntarios.
Alfafar, Chiva, Utiel, Catarroja, Paiporta, Sedaví, Massassa y Aldaia son algunos de los municipios valencianos que fueron más afectados, y en donde nuevamente rige una alerta naranja -la segunda más elevada- por fuertes lluvias, según informó la Agencia estatal de meteorología española (Aemet). “Habrá chubascos localmente muy fuertes y persistentes, incluidos en las zonas ya afectadas por las inundaciones del 29 de octubre”, explicó Rubén del Campo, portavoz de la Aemet, en un mensaje difundido en el canal Telegram de la agencia.
Con información de ANSA y AFP