La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, y el diputado de Sumar en Congreso, Iñigo Errejón, conversan durante una sesión plenaria en el Congreso de los Diputados, a 6 de febrero de 2024, en Madrid. (Fernando Sánchez / Europa Press)

Yolanda Díaz ha respondido este lunes a las preguntas de los periodistas sobre el caso de Íñigo Errejón, acusado por varias mujeres de violencia machista. Autocrítica, por parte de Sumar, ha hecho poca. “Si tuviera la menor sospecha de que cualquiera de ustedes es un agresor sexual haría lo mismo que he hecho esta semana. Responder con contundencia”, ha apuntado. Al ser preguntada por si existen protocolos o qué ocurriría en el caso de que se volviera a repetir esta situación de que aparezcan denuncias en redes sociales sobre casos de agresiones sexuales, ha respondido que “el problema en este caso es que nadie denunció”. “Para que se actúe tiene que haber una denuncia”, ha insistido.

La líder de Sumar ha recalcado que “el patriarcado forma parte de la violencia estructural” cuando le han preguntado si se arrepiente de haberlo nombrado portavoz en el Congreso de los Diputados”. En su defensa, ha negado que pudiera saber que Errejón fuera un posible agresor sexual. “Lo único que sabía era que asistía a terapia y que estabas mejorando”, ha asegurado. Ha reconocido en este sentido que no debería haber sido ni portavoz ni diputado, pero que no ha tenido información hasta esta semana.

Díaz ha relatado que el martes 22 de octubre, tras intervenir en el Congreso de los Diputados, fue cuando le informaron del testimonio que había publicado Cristina Fallarás en sus redes sociales sobre una mujer que aseguraba haber sido agredida sexualmente con el en ese momento portavoz de Sumar en la Cámara Baja. Ha apuntado que al día siguiente por la tarde, tras participar en la cumbre hispano portuguesa celebrada en Faro, llamó a Errejón quien reconoció que las acusaciones eran ciertas. “Fue una de las conversaciones más difíciles de mi vida”, ha afirmado.

Dos días mas tarde, el día 24, jueves, le comunica su cese de todas las funciones, pero sin expediente disciplicario alguno. En ese momento fue cuando Errejón publicó su comunicado en redes sociales del que la dirigente gallega dice que no comparte “en absoluto”.

La primera vez que se publicó un hilo sobre Íñigo Errejón y sus supuestas agresiones sexuales fue en 2023, tras un concierto. En aquel momento, la vicepresidenta segunda habló tanto con su equipo como con Ione Belarra, secretaria general de Podemos y Más Madrid. Desde este último le aseguraron que iba a haber una investigación. “Y me comunicaron que ese expediente se había cerrado”, ha asegurado. “Después me comunicaron que la mujer había retirado el tuit y nunca volví a saber de este hecho”, se ha defendido.

Noticia en ampliación