Tras un paréntesis de dos años, el Open House Buenos Aires, regresa en su 11º edición con visitas presenciales, caminatas y bicicleteadas en un nutrido catálogo con más de 129 propuestas.

El recorrido del Open House en la Chacarita. Habrá dos circuitos, con 6 o 7 panteones cada uno.

La del Cementerio de la Chacarita es una de ellas. Será mañana, sábado 26, de 10 a 14 horas, e incluye dos circuitos de panteones sociales, castrenses y religiosos. En algunos la visita será externa, circundando las obras, y en otras, está previsto el ingreso a la capilla, muchas de ellas verdaderas joyas de la arquitectura porteña.

Gran mural que representa a las Vírgenes patronas de las tres fuerzas.

El patrimonio edificado de Chacarita está viviendo un momento inédito, por la decidida intervención del flamante arzobispo de Buenos Aires, Monseñor Jorge Ignacio García Cuerva, natural de Río Gallegos, que por iniciativa personal está oficiando misas en las capillas de los panteones más monumentales, desconocidos para el gran público. El 4 de agosto ofreció un servicio en el Panteón del Centro Gallego y 29 de septiembre hizo lo propio en la Capilla del Panteón Nuestra Señora del Carmen, del Círculo de Suboficiales de Fuerzas Armadas, otra de las que se podrán visitar, obra de corte brutalista, en hormigón armado desnudo, que representa una flor de loto invertida, de tres subsuelos con contrafuertes sosteniendo el talud que hacen recordar a escenas de películas de ciencia ficción. En el altar, hay un gran mural representando a las vírgenes patronas de cada fuerza, –del Carmen (Ejército), de la Merced (Aeronaútica), Stella Maris (Marina) y Loreto (de las tres juntas), y un Cristo Crucificado, obra de 1997 de la muralista contemporánea Mónica Corrales.

Panteón Nuestra Señora del Carmen, de las Fuerzas Armadas.

García Cuerva es un apasionado de la escultura y arquitectura funeraria y también ha participado en las investigaciones del Cementerio de la Recoleta que intentan localizar los restos de Camila O´Gorman.

Panteones por fuera

El Sexto Panteón de la arquitecta Ítala Fulvia Villa, se recorrerá superficialmente por tareas de reparación, lo mismo que los espectaculares enterratorios de la Sociedad Española de Socorros Mutuos, obra del arquitecto gaditano de origen noruego Alejandro Christophersen, cerrado hace varios años por orden judicial, el de la Société Philanthropique Française du Río de la Plata, cuyos planos fueron donados a la entidad por el arquitecto galo Gastón Mallet, cuyo proyecto perdió el concurso del Panteón de la Policía Federal Argentina. Según la tradición oral de la familia Mallet allí descansarían los restos del coautor –junto a Jacques Dunant– del palacio del Centro Naval de Florida 801 y las casas de rentas monumentales de esquinas porteñísimas como Av. Pueyrredón y Av. Corrientes, Av. Córdoba y San Martín, Av. Córdoba y Talcahuano.

Sociedad Filantrópica y de Beneficencia Francesa del Río de la Plata.

Otros panteones que justifican su presencia en los circuitos propuestos son el de la Congregación Salesiana, que es una réplica a escala del templo de Av. Yrigoyen esquina Quintino Bocayuva de Almagro. Tiene una particularidad y es que la entrada cuenta con la cripta en el frente, tal como originalmente sucedía en la magnífica Basílica de San Carlos y María Auxiliadora (en la actualidad ya no es así): ambas son obras del arquitecto de la orden, el presbítero Ernesto Vespignani, proyectista insigne de la obra de Don Bosco en toda Sudamérica.

El panteón de la Congregación Salesiana es una réplica de la iglesia de San Carlos Borromeo y María Auxiliadora de Almagro. Ambos son obra de Vespignani.

Panteones con ingreso permitido a la capilla

  • El Panteón del Hospital Español de Buenos Aires, pertenece desde 2019 a la Federación de Sociedades Españolas de Argentina (FEDESPA). Es una obra de grandes dimensiones firmada por los arquitectos Guitarte y Sánchez. De impronta grecorromana, dos cariátides flanquean su entrada. Su remate escalonado se ve a cientos de metros y sus vasijas son de tres metros.
  • El Panteón de la Policía Federal, obra de los arquitectos Blas J. Dhers y Carlos Devoto, que vencieron al mencionado Mallet, para levantar este panteón de estilo neoclásico, con un frontis que muestra un escudo con una cabeza de Gorgona o medusa en el centro –usada por los líderes militares en combate para espantar los malos espíritus– y varios fascios, una palabra italiana que alude a un haz de varas amarrado con tiras de cuero, que contenía un hacha, símbolo de la autoridad republicana en la antigua Roma, apropiada dos mil años después por Benito Mussolini para aludir a la unión que hace la fuerza y fundar, el Fascismo. Este ornato decora muchas casas de justicia en todo el mundo occidental, incluido nuestro Palacio de Tribunales de Plaza Lavalle, antes, claro está, de su uso totalitario por parte del Duce. Su capilla, está decorada por vitrales y un importante altar. Destaca su cúpula decorada por estatuas de fuerte impronta cristiana. Dos representaciones de las llamas votivas, pétreo recuerdo de los caídos, coronan la entrada del patio cerrado.

El panteón de la Policía Federal y un detalle de sus

  • El Panteón del Centro Gallego es una de las pocas construcciones neorrománicas de la ciudad de Buenos Aires. Obra del ingeniero Alejandro Varangot, deslumbra por su cimborrio octogonal, sus dos atrios en forma de claustros con cada capitel diferente y estatuaria zoomorfa en sus remates. Dentro, la cruz representa un “cruceiro galego” conformado por un Cristo atravesado en su lecho sobre la imagen de pie de la Virgen María, obra de Francisco Asorey González.

El cruceiro galego es obra de Francisco Asorey González.

  • Hay que circundarlo para comprender la magnitud de su diseño, las arquivoltas de su portal, la fortaleza de su ábside. Varangot, autor del edificio Pini, en “V” sobre Diagonal norte y Sarmiento y el art decó de las esferas en José María Moreno 122, le ganó la final del concurso a la dupla de Edouard Le Monnier y Julián Jaime García Núñez. Por su ubicación, a la extrema derecha del peristilo de ingreso, es uno de los menos visitados, si bien su silueta es reconocible por los usuarios del tren que cruza la necrópolis y los vecinos que disfrutan de la nueva plaza sobre Av. Guzmán.

Panteón del Centro Gallego.

  • El Panteón Catalán, propiedad de la Asociación Catalana de Socorros Mutuos de Monte Pío de Monserrat, es obra del arquitecto Santiago Barris, construido por Bruguera y Noguera. Tiene un gran remate escalonado sobre un templete y toda una curiosidad: la entrada al subsuelo del panteón es independiente de la capilla, que tiene una representación de la gruta de Montserrat. Además, la firma de los hacedores está sobre la baranda, algo nunca visto, y tiene varias “adormideras” o bulbos de flores de amapola, símbolo universal de la planta asociada al sueño póstumo, la muerte. Los colores de la bandera catalana se replican en la herrería artística de la escalinata de ingreso.

Panteón Catalán.

  • El Panteón de la Asociación Argentina de Protección Mutua Mariano Moreno es obra del arquitecto Enrique Macchi, otro ejemplo de arquitectura grecorromana, con el clásico formato del Partenón, pero de menor escala, con un frontis con una acrótera, una moldura que se colocaba en la cima o extremos para jerarquizarlos, como los peristilos del cementerio de Recoleta o Chacarita misma. La frase en bronce “Memento Homo”, es una clara alusión apocopada de la frase, “Recuerda hombre que eres polvo y al polvo volverás” del libro del Génesis 3, 19, donde dice: “Con el sudor de tu rostro comerás el pan, hasta que vuelvas al suelo, pues de él fuiste tomado. Porque eres polvo y al polvo tornarás”. La pequeña capilla tiene un recoleto altar y una lámpara de bronce conformada por tres representaciones de las lámparas de aceite de la antigüedad egipcia.

Panteón de la Sociedad de Socorros Mutuos Mariano Moreno.

  • El Panteón B de las Fuerzas Armadas “Nuestra Señora de Luján” del Ejército y La Marina, con sus estatuarias de bronces representando a un guardiamarina y a un granadero, es otro panteón de grandes dimensiones que valen la pena visitar. Su enorme cimborro es uno de los más imponentes de Chacarita. Comparte, como la mayoría de los grandes panteones, la herencia arquitectónica que la hispanidad nos legó, abrevada de Grecia y Roma. Fue otro de los panteones el Arzobispo García Cuerva eligió para revalorizarlos en su real dimensión, dando en junio pasado la santa misa en una las capillas más amplias de la necrópolis.

Panteón B de las Fuerzas Armadas

Los dos recorridos del Open House serán coordinados la Lic. María Elena Tuma, responsable de Patrimonio Histórico y Cultural del Cementerio de la Chacarita y brindados por guías de turismo que participarán en forma voluntaria. A nivel institucional, el Cementerio de Chacarita, a cargo de Fernando Daniel Mateos, es parte de la Dirección General de Cementerios ocupada por la Dra. Ana Lávaque, dependiente de la Subsecretaría Gestión Comunal, a cargo de Guadalupe Rossi, que integra el Ministerio Espacio Público e Higiene Urbana.