Un paseo que fue terminó en susto y milagro. Un joven de 24 años, identificado como Guillermo Rivero, oriundo de la ciudad Granadero Baigorria, en la provincia de Santa Fe, sobrevivió luego de caer 20 metros por un precipicio en el área del parador El Águila, ubicado en el kilómetro 69 del Camino de las altas cumbres en la provincia de Córdoba.

El hecho ocurrió este miércoles por la mañana. El hombre estaba acompañado por dos amigas de 22 y 21 años en el momento del accidente, quienes indicaron que Rivero se desmayó mientras caminaban, lo que provocó su caída por el barranco en las inmediaciones del parador ubicado en la ruta provincial E34, según consignó La Voz.

Un hombre cayó de un precipicio en la zona de las altas cumbres en Córdoba y sobrevivió

Tras la caída, el equipo de rescate en áreas difíciles del Departamento de Urgencias y Rescates (Duar) de Punilla se dirigió hasta el lugar para socorrerlo. Al momento de rescatarlo, el joven se encontraba consciente, lo que facilitó su atención y posterior evacuación, agregó el medio local.

De acuerdo a la información de La Capital, en principio, el joven fue trasladado hasta el Servicio de Emergencias Médicas de Comuna del Sur para recibir los primeros auxilios. Luego, lo derivaron al Hospital Municipal Doctor Gumersindo Sayago en Villa Carlos Paz, donde se le realizó una evaluación médica y se constató que Rivero presenta algunos traumatismos, pero se encuentra estable y fuera de peligro.

Un caso similar

Algunos meses atrás, una fotógrafa cordobesa sufrió un accidente similar cuando estaba realizando una sesión de fotos al aire libre para una quinceañera. Estefanía Gudiño, de 25 años, cayó 25 metros al vacío en los Puentes Colgantes de Copina, cerca de Villa Carlos Paz. “Fue un milagro”, afirma Estefanía, en diálogo con El Doce.

“Me desmayé. Nadie me agarró y caí hacia una cascada. Reboté con una piedra mojada y terminé en el agua”, agregó. “Sé que fue automático. Sentí que se me apagó el televisor”, recordó Estefanía sobre el desmayo repentino que la llevó a una caída libre sobre el agua.

En un primer momento, los médicos le informaron un diagnóstico poco alentador a su familia: “Traumatismo de cráneo grave”. Sin embargo, al despertar, Estefanía sorprendió a todos al reconocer a sus padres y recordando el incidente. “Fue tremendo”, dijo y le agradeció a la familia que le brindó los primeros auxilios para salvar su vida: “Gustavo, Patricia, sus hijas y Álvaro son ahora parte de mi vida. Esto cambió mi perspectiva”.