La marcha de velas estudiantil comenzó, encabezada por los alumnos de la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad de Buenos Aires (UBA), quienes alzaron su voz con el cántico: “Si no hay presupuesto, qué quilombo se va a armar”. Los manifestantes ocuparon parcialmente la avenida Córdoba, a la altura de la sede educativa, dejando un solo carril habilitado para algunos vehículos, cuyos conductores respondieron tocando bocina. Mientras esperaban la llegada de estudiantes de otras facultades, se observaban ya carteles con mensajes como “Vetemos a Milei”, “Sin docentes no hay UBA” y “Tomar las facultades no es delito”.

Entre las organizaciones políticas presentes, el Partido Obrero destacó su apoyo a las demandas por un mayor presupuesto universitario. Sus integrantes corearon “Universidad de los trabajadores, y al que no le gusta se jode”, haciendo notar su presencia en el reclamo.

Estudiantes de distintas carreras se unieron al pedido colectivo. Lucía Fontela, alumna de la Facultad de Psicología, comentó: “Estamos acá porque necesitamos que la educación pública reciba el financiamiento que merece. Si no hay inversión, no podemos formarnos como corresponde”. Por otro lado, Juan Silva, de Ingeniería, expresó: “No es solo por nosotros, es por las futuras generaciones. Si no hay presupuesto, la calidad académica se va a deteriorar”.

Alumnos, docentes y partidos políticos reclaman más presupuesto para las universidades nacionales

Las columnas se dirigieron hacia el Palacio Sarmiento, sede de la Secretaría de Educación nacional, a cargo de Carlos Torrendell, donde tenían previsto encender velas al llegar.

Pilar Barbas, dirigente nacional de la Juventud de Izquierda Socialista y Secretaria de la Federación Universitaria Argentina, afirmó a LA NACION que las recientes movilizaciones, incluida esta marcha, se originaron tras la ratificación del veto de Javier Milei en el Congreso. “Nosotros nos estamos organizando, venimos del jueves de la noticia y, a partir de eso, se convocaron asambleas en casi todas las facultades. Hoy ya hay más de 100 facultades tomadas”, explicó.

Barbas destacó que las asambleas votaron continuar con cortes y cacerolazos, sumando una marcha de velas para visibilizar la lucha por el presupuesto universitario; en especial, por los salarios de docentes y no docentes, las becas y el boleto educativo. Además, expresó que se está evaluando la posibilidad de convocar una tercera marcha federal, con el fin de fortalecer la unidad estudiantil en este contexto.

Expulsan a una persona de la marcha de velas

Sobre la respuesta del Gobierno, Barbas fue tajante: “La campaña del Gobierno es muy mentirosa, es un ataque total a la educación pública gratuita. No quieren hablar sobre el problema real, que son los salarios de docentes y no docentes. Además, ignoran la realidad de que el 50% de los estudiantes en universidades nacionales trabaja y apenas puede llegar a estudiar, viviendo por debajo de la línea de pobreza”. Según la dirigente, si el Gobierno realmente se preocupara por la educación pública debería asignar mayor presupuesto para becas, boleto educativo y salarios.

Durante los cánticos en la marcha pacífica, un momento de tensión surgió cuando la multitud comenzó a corear “Fuera facho, fuera”. En ese instante, varios manifestantes formaron un círculo alrededor del periodista Mariano Pérez, conocido por su cercanía con el presidente Javier Milei. Lo que había sido un ambiente tranquilo se tornó tenso cuando Pérez fue confrontado por los manifestantes.

Luego de que él preguntara sobre las auditorías a las universidades, los manifestantes le pidieron que se retirara. Sin embargo, el periodista avanzó más hacia el centro de la manifestación, lo que intensificó la situación. La multitud comenzó a empujarlo para que se alejara. En medio del tumulto, una mujer se acercó gritando: “El pueblo está acá”. Un pequeño grupo empezó a empujar a Pérez, lo que llevó a la intervención de la policía, que lo escoltó fuera del lugar.

Marcha de velas universitaria

Mientras lo retiraban, un grupo lo siguió por una cuadra. Pérez afirmó que había sido agredido, pero los manifestantes negaron la acusación, asegurando que él había acudido con intenciones de provocar. Tras la intervención policial, la marcha recuperó su calma y continuó su marcha hasta alcanzar la Secretaría de Educación, donde confluyeron otros estudiantes que previamente habían protestado en Independencia y Lima.