
Rick Rubin formalizó su visión sobre el fenómeno emergente del vibe coding, un enfoque que propone “dar instrucciones a la inteligencia artificial en lenguaje natural” y que, en sus palabras, constituye “el punk rock de la programación”. Durante una entrevista en el podcast de cultura y tecnología The Ben & Marc Show, el productor, el famoso productor presentó su libro interactivo The Way of Code: The Timeless Art of Vibe Coding (El camino del código: El arte atemporal de la codificación con vibra) como una fusión de “una enseñanza de sabiduría de 3.000 años combinada con tecnología de punta”.
Rubin, reconocido por su trabajo con Johnny Cash, Red Hot Chili Peppers, Beastie Boys, Lady Gaga y Metallica, descubrió el concepto del vibe coding tras ver una antigua fotografía suya convertida en meme. Aquella imagen lo hizo indagar sobre el tema con suficiente interés como para bromear al respecto en redes sociales, aunque pronto reconoció que la curiosidad creció: “El universo me está arrastrando hacia esto”, afirmó Rubin durante la conversación con Ben Horowitz y Marc Andreessen.
El análisis de Rick Rubin sobre las posibilidades de este paradigma tecnológico se centró en la relación entre creatividad y accesibilidad. “Antes, en la música, tenías que ir al conservatorio y estudiar durante años y años. Entonces, algún día, podías tocar en una sinfónica”, explicó. Señaló que cuando surgió el punk rock, fue posible “aprender tres acordes en un día —y había todas estas bandas. Eso lo democratizó. Así fue como empecé en la música, con el punk rock. Si tenías algo que decir, podías decirlo. No necesitabas experiencia ni habilidades, aparte de tu idea y tu capacidad de transmitirla. Y el vibe coding es lo mismo: es el punk rock de la codificación”.

Al abordar la amenaza de la inteligencia artificial hacia los creativos, Rubin defendió la singularidad del punto de vista humano: “La razón por la que vamos a los artistas a los que vamos, o los escritores a los que vamos, o los cineastas a los que vamos, es por su punto de vista. La IA no tiene un punto de vista”, afirmó.
El productor auguró que la IA habilitará a nuevas generaciones para intervenir en la cultura popular sin depender de años de aprendizaje técnico: “La IA te da la posibilidad de tomar tus ideas, alimentarla con ellas y luego obtener diferentes iteraciones que, normalmente, tú harías, pero te llevaría mucho más tiempo. Es más bien un proceso de modelado”, sostuvo Rubin.
The Way of Code utilizó capacidades interactivas generadas junto al chatbot Claude, permitiendo que los lectores editaran animaciones a través de indicaciones directas. Sin embargo, la funcionalidad demostró ciertas limitaciones, como el hecho de que el proceso podía requerir abrir una nueva ventana y esperar que la IA generara cientos de líneas de código sin garantías de resultado inmediato. El sistema, además, costó 20 dólares al mes. El propio Rubin reconoció el potencial y los riesgos: “Ahora veremos que puede crear una animación que se parezca a tu caricatura favorita, y luego verás a un millón de personas haciendo eso. Esa es una idea. Quiero ver todo lo que podría hacer para entender qué es posible, en lugar de simplemente decir ‘voy a hacer que haga lo mismo que todos los demás hacen’”.