El Ejército de Ucrania confirmó este martes que sus tropas se retiraron de la ciudad de Siversk, en el este del país, luego de semanas de intensos enfrentamientos con fuerzas rusas.
La decisión, según explicó el Estado Mayor de las Fuerzas Armadas ucranianas, respondió a la necesidad de preservar la vida de los soldados y mantener la capacidad operativa de las unidades desplegadas en la zona.
“Con el fin de preservar las vidas de nuestros soldados y la capacidad de combate de las unidades, los defensores ucranianos se retiraron de la localidad”, señaló la institución militar en un comunicado difundido en redes sociales.
El Estado Mayor ucraniano reconoció que las tropas rusas cuentan con “una ventaja significativa de personal y equipamiento” y que, pese a sufrir bajas considerables, mantienen operaciones ofensivas activas en el área.
Siversk, ubicada en la región oriental de Donetsk, tenía antes de la guerra una población cercana a los 11.000 habitantes. Tras casi tres años de invasión rusa, la ciudad se encuentra en gran parte destruida. Su valor estratégico radica en su posición geográfica, ya que se sitúa cerca de las rutas que conducen a Sloviansk y Kramatorsk, dos de los principales centros urbanos del Donbás que permanecen bajo control ucraniano.

Las autoridades militares de Kiev indicaron que los avances rusos fueron posibles por la combinación de superioridad numérica y una presión ejercida mediante pequeños grupos de asalto, incluso bajo condiciones meteorológicas adversas.
“Los ocupantes rusos lograron avanzar gracias a su superioridad numérica y a la presión constante”, afirmó el Estado Mayor, que destacó que los combates en la zona continúan siendo intensos.
Rusia había anunciado la captura de Siversk el pasado 11 de diciembre. El Kremlin informó de la supuesta conquista tras una reunión del presidente Vladimir Putin con altos mandos militares, en la que se presentó el avance como un nuevo éxito de la ofensiva rusa en el este de Ucrania. Kiev, sin embargo, evitó durante días confirmar oficialmente la pérdida de la ciudad, mientras reportaba enfrentamientos activos en sus alrededores.
En su comunicado más reciente, el Estado Mayor ucraniano sostuvo que, durante la defensa de Siversk, las fuerzas de Kiev infligieron importantes daños al enemigo.

“Las fuerzas de defensa ucranianas agotaron al enemigo durante los combates por Siversk; cada metro de la ciudad fue cedido a un alto precio”, indicó el mensaje oficial. Además, afirmó que la localidad sigue estando al alcance de la artillería ucraniana y que las tropas rusas en la zona enfrentan dificultades logísticas.
Analistas militares señalan que la caída de Siversk puede facilitar el avance ruso hacia Sloviansk y Kramatorsk, consideradas bastiones clave en la región de Donetsk. Desde septiembre de 2025, las fuerzas de Moscú se habían aproximado a la ciudad desde tres direcciones, antes de debilitar las defensas ucranianas locales entre noviembre y diciembre, según evaluaciones independientes.
El repliegue se produce en un contexto de aceleración de los avances rusos en el frente oriental. Rusia ocupa actualmente alrededor del 19% del territorio ucraniano y, en los últimos meses, ha reivindicado la captura de varios puntos estratégicos. Entre ellos se encuentra Pokrovsk, un nudo logístico relevante cuya pérdida representó un golpe para las líneas de suministro ucranianas.

De acuerdo con un análisis basado en datos del Instituto para el Estudio de la Guerra (ISW) y el Critical Threats Project, Moscú registró en noviembre su mayor progreso territorial en un año. Estos centros de análisis, con sede en Estados Unidos, advierten que la presión rusa se mantiene constante a lo largo de varios sectores del frente, mientras Ucrania enfrenta limitaciones de recursos y personal.
(Con información de EFE)