El expresidente brasileño Jair Bolsonaro aparece en la puerta de su casa (REUTERS/Mateus Bonomi)

El ex presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, quien cumple una condena de 27 años en la sede de la Policía Federal en Brasilia desde noviembre, fue autorizado este viernes a salir de prisión para someterse a una cirugía de hernia, según decisión del juez del Supremo Tribunal Federal (STF), Alexandre de Moraes.

La fecha exacta de la intervención aún no fue definida, aunque la autorización llegó tras la confirmación médica de que Bolsonaro padece una hernia inguinal bilateral que le provoca episodios de dolor.

Desde que sufrió un ataque con arma blanca durante la campaña del 2018, el ex mandatario —que gobernó Brasil entre 2019 y 2022— pasó por varias operaciones derivadas de esa agresión.

Pese al permiso para la cirugía, De Moraes rechazó la petición de prisión domiciliaria tras el tratamiento hospitalario, por lo que Bolsonaro deberá regresar a su lugar de detención una vez dado de alta.

El ex presidente permanece aislado de los demás reclusos en una habitación de 12 metros cuadrados, equipada con baño privado, aire acondicionado, televisión y escritorio. Según las autoridades, tiene acceso libre a sus médicos y abogados, mientras que la visita de cualquier otra persona debe contar con el aval del STF.

El ex presidente brasileño Jair Bolsonaro en la entrada de su casa (AP Foto/Luis Nova,)

La defensa de Bolsonaro presentó el lunes oasadi la petición ante la Corte Suprema de Brasil para que el ex presidente obtenga autorización para una cirugía abdominal y cumpla el resto de su condena en prisión domiciliaria por razones humanitarias.

El equipo legal argumentó que la salud de Bolsonaro “es grave, compleja y se ha deteriorado de manera progresiva”, lo que justificaría tanto la necesidad de una intervención quirúrgica urgente como su traslado a un régimen menos restrictivo.

En el documento remitido al juez Alexandre de Moraes, responsable del caso, los abogados insistieron en que la condición clínica del ex mandatario exigía una operación de urgencia. Según el abogado Paulo Cunha Bueno, su defendido padece dos hernias inguinales que podrían comprometer el funcionamiento de su aparato digestivo.

Los representantes de Jair Bolsonaro ante la Justicia también solicitaron a la Corte Suprema de Brasil que se le autorice recibir sesiones de fisioterapia en la celda donde cumple condena, ubicada en la Superintendencia de la Policía Federal en Brasilia.

El juez del Tribunal Supremo de Brasil, Alexandre de Moraes (AP Foto/Eraldo Peres)

Desde que fue detenido, la defensa y la familia de Jair Bolsonaro solicitaron de forma reiterada a las autoridades que se le otorgue prisión domiciliaria humanitaria, argumentando los diversos problemas de salud que soportó el ex mandatario.

Bolsonaro permanece recluido en la sede de la Policía Federal desde finales de noviembre, después de ser detenido al intentar remover, con la asistencia de un soldador, la tobillera electrónica que la Corte Suprema le había ordenado llevar como medida cautelar.

La condena contra el ex presidente fue dictada por un panel de jueces del Supremo Tribunal Federal, que lo halló culpable no sólo de intentar un golpe de Estado tras perder las elecciones de 2022, sino de liderar una organización criminosa armada e intentar abolir el Estado democrático de derecho.

La causa detalla que entre los planes del grupo estaban atentados contra el presidente Luiz Inácio Lula da Silva, el vicepresidente Geraldo Alckmin y el propio De Moraes, así como fomentar un levantamiento a principios de 2023.

(Con información de Associated Press)