La posibilidad de que Pep Guardiola abandone el Manchester City al término de la temporada 2025/26 activó los mecanismos de sucesión en el club inglés, que ya sitúa a Enzo Maresca, actual entrenador del Chelsea, como uno de los principales candidatos para ocupar el banquillo del Etihad Stadium, según informaron fuentes de la directiva citadas por The Athletic. Aunque Guardiola renovó su contrato en noviembre de 2024 hasta junio de 2027, la expectativa de que esta sea su última campaña al frente del City ha ido en aumento, y la decisión definitiva se tomará cuando la temporada se acerque a su desenlace.
El interés del City en Maresca representa un desafío para el Chelsea, que ha experimentado una notable evolución bajo la dirección del técnico italiano. Desde su llegada en junio de 2024, tras lograr el ascenso a la Premier League con el Leicester City, Maresca ha guiado a los Blues a la clasificación para la Champions League por primera vez desde la adquisición del club por el consorcio Todd Boehly-Clearlake, además de conquistar la UEFA Conference League y el Mundial de Clubes. Actualmente, el Chelsea ocupa la cuarta posición en la Premier League tras 16 jornadas, mientras que el City se sitúa seis puntos por delante en el segundo puesto.

La figura de Maresca resulta especialmente atractiva para la directiva del Manchester City debido a su pasado en la institución. El italiano, de 45 años, dirigió al equipo Sub-21 durante la temporada 2020-21 y regresó como asistente del primer equipo en el verano de 2022, coincidiendo con la histórica campaña del triplete. Su conocimiento de la estructura interna y su afinidad con la filosofía de juego del club lo posicionan como un candidato destacado, aunque no es el único perfil considerado. Otros nombres como Vincent Kompany (Bayern Múnich), Roberto De Zerbi (Olympique de Marsella) y Andoni Iraola (Bournemouth) también figuran en la lista de posibles sucesores.
El contrato de Maresca con el Chelsea se extiende hasta 2029, con opción de prórroga por un año adicional, lo que complica una eventual salida. Además, la reciente obtención de títulos y el respaldo de la afición, que coreó su nombre tras la victoria en la Carabao Cup ante el Cardiff City, refuerzan su posición en Stamford Bridge. No obstante, en los últimos días han surgido señales de tensión interna. Tras el triunfo por 2-0 sobre el Everton, Maresca declaró: “Fueron las peores 48 horas desde que me uní al club, porque mucha gente no nos apoyó”. Aunque evitó profundizar en sus declaraciones posteriores, la frase alimentó especulaciones sobre su relación con la directiva.
El propio Guardiola ha elogiado públicamente a Maresca, calificándolo como “uno de los mejores entrenadores del mundo” y subrayando que “el trabajo que ha hecho en el Chelsea no recibe suficiente crédito”, según declaraciones recogidas por The Athletic. Este reconocimiento refuerza la percepción de que Maresca sería un heredero natural del legado del técnico catalán en el City.
Guardiola, que llegó al club en 2016 y ha conquistado 18 títulos, incluidos seis campeonatos de la Premier League, una Champions League y un Mundial de Clubes, ha manifestado en reiteradas ocasiones su intención de tomarse un descanso tras finalizar su etapa en Manchester. En una entrevista con ESPN Brasil en mayo, afirmó: “Después de mi contrato con el City, voy a parar. Estoy seguro. No sé si me retiraré, pero me tomaré un descanso”.
La eventual salida de Guardiola supondría el cierre de una era sin precedentes en la historia del Manchester City y de la Premier League. El club deberá afrontar el reto de mantener su estatus competitivo y su identidad futbolística, mientras se prepara para una transición que, según The Athletic, podría estar marcada por la salida simultánea de figuras emblemáticas como Bernardo Silva y John Stones, los últimos supervivientes del primer título de Guardiola en 2017-18.
En este contexto, la elección del próximo entrenador adquiere una dimensión estratégica. El City ha construido una plantilla con jóvenes talentos como Phil Foden y Erling Haaland, ambos de 25 años, que están llamados a liderar la nueva etapa. La decisión sobre el futuro del banquillo se tomará en los próximos meses, cuando se aclare si Guardiola pone fin a su ciclo y si Maresca, pese a su contrato y los éxitos recientes en el Chelsea, se convierte en el elegido para sucederlo.