Las acciones argentinas concluyen la operatoria semanal con leve tendencia bajista, influida por la tendencia negativa de los negocios de Wall Street, mientras que los bonos soberanos exhiben un leve rebote.
El S&P Merval de la Bolsa de Comercio de Buenos Aires resta 0,6%, en los 2.960.000 puntos a las 13 horas.
Con índices de Nueva York que caen hasta 1% encabezados por el derrotero de los valores tecnológicos, los precios de los ADR y acciones de compañías argentinas que son negociados en dólares en Wall Street caen hasta 1,8%, con Banco Macro al frente.

Los bonos soberanos en dólares -Bonares y Globales- suben un 0,2% en promedio, mientras que el riesgo país de JP Morgan cae cinco unidades para la Argentina, en los 627 puntos básicos.
En medio de una relativa tranquilidad en materia financiera, tras recientes licitaciones del Tesoro que despejaron dudas sobre próximos vencimientos de deuda, y una plaza cambiaria sin presiones ante necesidades estacionales de pesos, los mercados domésticos operaban el viernes sin mayores oscilaciones.
El Tesoro logró en la víspera colocar 21,27 billones de pesos en efectivo (equivalentes a unos USD 14.802 millones) en una licitación de diez títulos de corto plazo en moneda local, lo que significó una renovación (rollover) de 102,01% sobre los vencimientos, un día después de que adjudicara un bono por 1.000 millones de dólares al 2029 con un rendimiento del 9,26% anual bajo legislación local y un cupón del 6,5 por ciento.
“El Merval en dólares muestra un estancamiento prolongado en la zona de USD 2.000, lo cual se atribuye a los bajos volúmenes de negociación y a que los fundamentos empresariales no justifican una suba sostenida sin que se resuelvan las grandes reformas impulsadas por el Gobierno”, comentaron los analistas de Rava Bursátil.
“La renta variable se mantiene con fuertes oscilaciones de la mano de un clima de mercado local y externo que también es volátil”, indicó MegaQM.
En este contexto, el dólar interbancario se mantenía estable a 1.438 pesos, en una plaza con recorte de liquidez y sin presiones dolarizadoras de carteras.
El retorno a los mercado internacionales de deuda “permitiría en simultáneo activar una decidida acumulación de reservas con un círculo virtuoso sobre la reducción del costo de financiamiento”, dijo el economista Gustavo Ber.
El aumento en el nivel de reservas del Banco Central es una cuestión clave para el sostenimiento del actual programa económico, en momentos en que la entidad monetaria no logra comprar divisas en el mercado pese a abultadas liquidaciones del sector agroexportador.
“La sostenibilidad del modelo se juega en un riesgo país controlado y un nivel de reservas que brinde la cobertura necesaria para mantener la estabilidad nominal”, estimó Emilio Botto, jefe de Estrategia de Mills Capital Group.
El Gobierno oficializó este viernes un recorte en los impuestos a las exportaciones de granos y sus derivados, lo que generó moderado entusiasmo entre los agricultores, mientras los empresarios industriales reclaman igualdad de condiciones frente al aluvión de bienes importados que está llegando por la apertura comercial dispuesta por el Gobierno ultraliberal de Javier Milei.
Los analistas de Portfolio Personal Inversiones observaron que “la inflación general volvió a acelerarse hasta 2,47% en noviembre, encadenando seis meses consecutivos de aumentos desde el 1,5% de mayo. La tasa anualizada de la media móvil de tres meses refleja claramente esta tendencia al alza: tras tocar un piso en la era Milei de 22% en junio -el ritmo más bajo desde el 20,9% de noviembre de 2017-, repuntó hasta 31,3% en noviembre”.
“De todas formas, el dato más preocupante fue la núcleo, que subió de 2,22% a 2,64% y acumuló su tercer aumento mensual consecutivo. Mirando la tendencia, la media móvil de tres meses anualizada también aceleró por tercer mes al hilo, pasando de 23,1% en agosto -mínimo de la gestión- a 30,6% en noviembre”, añadieron desde Portfolio Personal.